Al menos 7 de cada 10 consultas clínicas en los sistemas de salud de la región podrían generarse debido a problemas psicosomáticos, situación que puede agravarse durante la pandemia del COVID-19, de acuerdo a especialistas.
"El confinamiento puede llevar a que las personas no atiendan su salud mental", dijo Raymundo Calderón, director de Psicología de la Universidad del Valle de México (UVM).
En entrevista con Efe, el especialista, estimó que el 70 % de las consultas que se atienden en los sistemas públicos de salud tiene correlación con problemas de la mente.
En tanto, la directora de la Escuela de Ciencias de la Salud de la UVM Querétaro, Nayelly Arias, indicó que en muchos casos y de no ser tratados adecuadamente, los problemas de salud mental pueden derivar en un suicidio.
"Es imprescindible enfocarnos en cuidar nuestra salud mental, así como cuidamos la salud física", manifestó Arias.
Mientras que la coordinadora de la carrera de Psicología de la UVM Chihuahua, Grissel Cervantes, estimó que en México unos 34 millones de personas viven en condiciones de hacinamiento, un escenario poco propicio para una buena salud en general y en especial la mental.
"Más de dos personas viven en un cuarto de menos de 12 metros cuadrados y bajo estas condiciones es probable que se exacerben emociones que contribuyan a que las personas se depriman, se incremente el miedo, la angustia, la preocupación y eso puede llevar a un descontrol emocional", apuntó.
PIDEN EVITAR EXCESO DE INFORMACIÓN
Los especialista coincidieron en que es posible cuidar la salud mental en tiempos de confinamiento, siempre y cuando se gestione adecuadamente la información y se tenga cuidado en controlar los episodios de ansiedad.
"Debemos gestionar la manera en la que recibimos las noticias, sobre todo si se trata de coronavirus, no estar pendientes todo el tiempo de esa información para lograr que el pensamiento sea adecuado", manifestó Cervantes.
Consideró como básico lograr un control de la higiene mental y para ello dijo que es necesario filtrar información que entra al pensamiento y analizar si la información abona a la realidad o al problema.
Arias explicó que las personas deben recordar que este confinamiento "es una situación excepcional" y se debe manejar como tal ya que "en algún momento va a acabar".
Señaló que, especialmente en los cuidadores de enfermos por COVID-19, se debe buscar un espacio en el que se sientan seguros y tranquilos
"Deben dedicar tiempo a alguna actividad recreativa, al ejercicio, necesitamos poner especial atención a actividades que nos representen satisfacción", aludió.
Del mismo modo, pidió que se evite pensar en el momento en que llegue el fin del confinamiento, pues eso solo genera ansiedad, y lo mejor es desarrollar metas realistas y entender que el distanciamiento es físico y no social.
"No se trata de no relacionarse con nadie, sino de estar en contacto con los que más queremos", afirmó.
Finalmente, Calderón señaló que así como en este momento se está poniendo especial atención en lo que entra a los hogares, también se debe prestar cuidado a lo que las personas dejan entrar en sus pensamientos.