Los casos de viruela del mono vinculados al actual brote en países no endémicos ascienden actualmente a 780, un 88 % de ellos diagnosticados en Europa, indicó hoy el último informe de situación sobre esta enfermedad publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los laboratorios han confirmado este patógeno en 27 países no pertenecientes a las regiones endémicas de África central y occidental, siendo Reino Unido el país con más contagios (207), seguido de España (156), Portugal (138), Canadá (58) y Alemania (57).
También se han registrado más de una decena de casos en EEUU, Bélgica, Francia, Italia y Países Bajos, así como dos contagios en Argentina y uno en México, de acuerdo con los datos recibidos por la OMS desde las redes sanitarias nacionales.
A la vista del aumento de casos confirmados, que se han triplicado en una semana, la organización con sede en Ginebra mantiene el riesgo global de este brote en nivel "moderado", al tratarse de la primera vez que se registra transmisión en países no endémicos y además con tantos focos y tan diseminados.
La mayoría de los casos han sido detectados en consultas de salud sexual y otros puntos de atención primaria y secundaria, "e involucran principalmente, pero no exclusivamente, a hombres que mantienen sexo con otros hombres", reiteró el informe de seguimiento.
La secuenciación del virus en muchos laboratorios de países afectados indica que el brote está vinculado a las variantes de viruela del mono de África occidental, en principio con menor letalidad que las de la parte central del continente.
En lo que va de año, en los países endémicos se han registrado 1.408 casos sospechosos de viruela del mono y 66 muertes, en su mayoría en la República Democrática del Congo aunque también con más de una decena de contagios en Camerún, República Centroafricana y Nigeria.
Los casos del brote en países no endémicos están en su mayoría ligados a personas que han viajado por países europeos o de América, con unos pocos contagios posiblemente ligados con desplazamientos desde Nigeria.
No se han registrado fallecimientos en relación con el brote en naciones no endémicas, pero sí algunas hospitalizaciones en algunos casos relacionadas con complicaciones derivadas de otras infecciones del paciente.
Muchos pacientes han mostrado inicialmente erupciones cutáneas en zonas genitales y anales, lo que parece sugerir que la principal ruta de transmisión en varios casos ha sido el contacto sexual, aunque la OMS insiste en que puede contagiarse por contacto físico estrecho no necesariamente ligado a actos sexuales.
La OMS concluye en el informe de hoy que es "altamente probable" que aumenten los casos y los países en los que se diagnostiquen, aunque afirma que el riesgo para la población en general sigue siendo bajo.
No obstante, ese riesgo "podría aumentar si el virus aprovecha la oportunidad de establecerse en países no endémicos como un patógeno ampliamente extendido", advirtió el documento.
El organismo subraya que los profesionales sanitarios deben adoptar las principales medidas de prevención por ahora, ya que son quienes mayor riesgo corren de contagiarse si no toman las medidas de control necesarias o no llevan el equipamiento de protección personal adecuado.
En pacientes con VIH, puede haber riesgo de desarrollar formas graves de la enfermedad si no siguen tratamiento con antirretrovirales o tienen el sistema inmunitario debilitado, indica la OMS, quien también advierte que en mujeres embarazadas que contraigan la enfermedad ello podría traer complicaciones al feto.
La OMS subraya que como en la covid, los acontecimientos multitudinarios pueden ser vectores de transmisión, por lo que, aunque no aconseja cancelaciones de este tipo de eventos, sí recomienda informar a los asistentes de los posibles riesgos, así como adoptar medidas de prevención tomadas durante la pandemia como el distanciamiento físico, cubrirse al toser o la higiene de manos.
La organización internacional mantiene su negativa a toda restricción de viajes y movimientos para contener el brote, aunque pide que se mantengan las medidas de vigilancia ante personas que desarrollen síntomas y que se rastreen sus posibles contactos recientes.