La Organización Mundial de la Salud (OMS) adoptó hoy, en su 78.ª Asamblea Mundial, una resolución histórica que declara las enfermedades raras como una prioridad de salud global, reconociendo su impacto en más de 300 millones de personas en el mundo.
La resolución, promovida por España y Egipto, encarga la creación de un plan de acción de 10 años con metas concretas para promover la equidad, la inclusión y el acceso a diagnóstico y tratamiento asequible. El borrador de este plan será presentado en la Asamblea Mundial de la Salud de 2028.
El organismo internacional insta a los países a incorporar estas enfermedades en sus políticas nacionales de salud pública, mediante la implementación de planes que incluyan prevención, detección temprana —como el cribado neonatal—, atención multidisciplinaria, rehabilitación y apoyo psicosocial.
Asimismo, resalta la necesidad de aumentar la inversión público-privada en investigación, fortalecer la formación de profesionales de la salud para una mejor detección y fomentar la inclusión activa de las personas afectadas por estas enfermedades.
“Hoy tenemos la oportunidad de transformar la vida de millones de personas. Pero para que estos compromisos se conviertan en mejoras reales, no basta con palabras: necesitamos un esfuerzo global y coordinado, una hoja de ruta común y ambiciosa que guíe nuestras acciones y garantice que ningún paciente quede atrás”, afirmó la ministra de Sanidad de España, Mónica García.
