Muchas pequeñas empresas del Reino Unido están sumidas en la "parálisis" por la incertidumbre política que provoca el "brexit", que las ha llevado a suspender contrataciones e inversiones, según un informe publicado hoy por la Federación de Pequeños Negocios británica (FSB, en sus siglas en inglés).
Una encuesta elaborada sobre una muestra de 1.000 compañías británicas con entre 10 y 50 empleados indica que tan solo una de cada diez ha firmado nuevos contratos en los últimos tres meses.
La misma proporción señala que se han visto obligadas a recortar su plantilla en ese periodo.
Más de un tercio de las compañías asegura que sus ingresos están cayendo y una de cada cuatro afirma que su crecimiento se ha estancado.
"A las pequeñas empresas les dijeron que hoy estaríamos abandonando la Unión Europea (UE) con un buen conocimiento sobre lo que depararía el futuro", pero, "en lugar de eso, hemos sufrido mil días de incertidumbre desde el referéndum del 'brexit', lo que nos ha impedido planificar, invertir y crecer", lamentó el presidente de la FSB, Mike Cherry.
El 29 de marzo era la fecha original para la partida británica de la UE, pero ese límite es ahora el 12 de abril, en caso de que el Parlamento no apruebe un tratado de salida, o bien el 22 de mayo, si la Cámara de los Comunes respalda un acuerdo.
La Federación de Pequeños Negocios critica que "muchos políticos han dado prioridad a las maquinaciones" internas antes que preocuparse por el futuro de las empresas, que han sido "abandonadas en la oscuridad".
Cherry urgió al Gobierno a proveer a las pequeñas firmas de ayudas a fin de poder acceder al asesoramiento y los equipos necesarios para acomodarse a las nuevas regulaciones sobre importaciones y exportaciones que previsiblemente entrarán en vigor una vez el Reino Unido abandone la UE.