El duro análisis de Darroch está contenido en una serie de documentos redactados desde 2017 a los que ha tenido acceso ese medio, los cuales no dejan en buen lugar a la Casa Blanca ni a la diplomacia británica.
El embajador también advierte en sus misivas de que para comunicarse con Trump es "necesario presentar argumentos simples, incluso rudos", al tiempo que se pregunta si la administración republicana "será algún día competente".
"No creemos realmente que esta administración vaya a ser mucho más normal; menos disfuncional, menos impredecible; menos dividida en facciones; menos torpe diplomáticamente e inepta", escribe Darroch.
En otra comunicación, el jefe de la diplomacia británica en EE. UU. indica que Trump se sintió "deslumbrado" por la pompa y el boato desplegado por Londres durante la visita de Estado efectuada al Reino Unido el pasado junio.
No obstante, precisa Darroch, el mandatario estadounidense seguirá guiando su política por el "interés propio", ya que "este es el país de América Primero".
Asimismo, califica de "incoherente" y "caótica" la posición de Washington respecto a Irán y pone en duda los motivos que dio Trump para suspender sus represalias bélicas contra Teherán tras el derribo de un dron estadounidense en el golfo Pérsico el pasado mes.
Trump dijo entonces que no lanzó ataques aéreos por miedo a los daños colaterales, pero Darroch cree que se echó atrás para proteger su imagen de cara a su reelección en la campaña de 2020, pues llegó a la Casa Blanca prometiendo que reduciría la implicación de su país en conflictos foráneos.
Respecto a las sospechas de connivencia entre el bando de Trump y Rusia en la campaña de las presidenciales de 2016, el embajador dice que "no se puede descartar lo peor".
Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores británico difundió este domingo un comunicado en el que recuerda que la ciudadanía "espera" que "nuestros embajadores" ofrezcan un "análisis honesto y sin adornos" de la política de sus respectivos países.
"Sus opiniones no coinciden necesariamente con las de los ministros ni con las del Gobierno. Pero les pagamos para que sean sinceros. De la misma manera, el embajador de EE. UU. aquí mandará sus impresiones de la política y personajes en Westminster", explicó la fuente.
El portavoz insistió en que la misión diplomática en Washington mantiene "unas relaciones estrechas con la Casa Blanca" y que "esta travesura", en referencia a la filtración de documentos, no alterará esa situación.