La estrella televisiva Kim Kardashian pidió este miércoles "compasión y empatía" hacia la salud mental de su marido, el rapero Kanye West, a quien diagnosticaron un trastorno bipolar y está protagonizando titulares por sus intenciones de ser candidato a la Presidencia de Estados Unidos.
"Como muchos saben Kanye tiene un trastorno bipolar. Cualquiera que lo tenga o que conozca a alguien en su vida con ello sabe lo increíblemente complicado y doloroso que es de entender", aseguró Kardshian en su primera intervención pública sobre este asunto.
"Nunca he hablado públicamente sobre cómo esto nos ha afectado en casa porque soy muy protectora con mis hijos y con el derecho a la privacidad de Kanye en términos de su salud", explicó en una historia de Instagram.
La estrella indicó también que publicaba el comunicado por los "estigmas y malentendidos" que existen en torno a la salud mental, y que en el caso de su marido se amplifican por su fama e impacto en las redes sociales.
"Entiendo que Kanye es sujeto de críticas por ser una figura pública y sus acciones pueden despertar a veces opiniones y emociones fuertes", continuó.
"Él es una persona brillante y complicada -describió-. (…) Aquellos que somos cercanos a Kanye conocemos su corazón y entendemos que sus palabras a veces no se alinean con sus intenciones".
Justo horas antes, West publicó un tuit en el que aseguraba que estaba intentando divorciarse de su mujer pero que borró poco después.
Sus declaraciones se produjeron dos días después de protagonizar este domingo su primer acto de campaña tras anunciar su candidatura a la Presidencia de EE.UU., un peculiar mitin en Carolina del Sur en el que propuso premiar con un millón de dólares a quienes tengan un bebé.
West, cuyo anuncio de que se presentaría a las elecciones de noviembre provocó este mes una gran conjetura sobre si simplemente buscaba publicidad o incluso favorecer las opciones de reelección del presidente estadounidense, Donald Trump, estrenó su incipiente campaña en la localidad de North Charleston.
No está claro qué futuro puede tener la campaña del rapero, que hasta hace apenas unas semanas apoyaba fervientemente a Trump, porque el plazo para registrarse ya ha expirado en media docena de territorios y los requisitos son complicados en otros.