Un juez federal de Florida (EE.UU.) desestimó una demanda de Donald Trump contra Hillary Clinton y el Comité Nacional Demócrata (DNC), a quienes acusó de conspirar durante la campaña electoral de 2016 con el fin de hacer creer al electorado de que tenía vínculos con Rusia.
El magistrado del distrito sur de Florida Donald Middlebrooks señaló en su decisión que "la mayoría de los reclamos del demandante no solo no están respaldados por ninguna autoridad legal, sino que están claramente excluidos por un precedente vinculante".
El expresidente Trump entabló la demanda el pasado marzo, en la que incluyó también a funcionarios e instituciones, y alegó que Clinton, su oficina de campaña y hasta el exdirector del FBI James Comey, entre otros, "conspiraron maliciosamente para tejer una narrativa falsa".
"La trama fue concebida, coordinada y llevada a cabo por funcionarios de alto nivel en la campaña Clinton y el DNC", dijeron los abogados de Trump, quienes señalaron que el "ataque de múltiples frentes" buscaba "difamar públicamente" a Trump "instigando un frenesí mediático".
El magistrado Middlebrooks manifestó en su escrito ingresado en la corte el jueves, y del que hoy hacen eco medios estadounidenses, que con su demanda el expresidente "está tratando de hacer alarde de un manifiesto político de doscientas páginas que esboza sus quejas contra aquellos que se le han opuesto, y esta Corte está no es el foro apropiado".
Alina Habba, abogada del expresidente, mostró su desacuerdo con los argumentos del juez y adelantó que apelará la decisión, según recoge el medio digital Axios.
"No solo está plagado de aplicaciones erróneas de la ley, sino que también ignora las numerosas investigaciones gubernamentales independientes que corroboran nuestra afirmación", argumentó Habba.
La decisión del juez se da el mismo día en que el Departamento de Justicia de EE.UU. anunció que apelará la orden de una juez federal, que aceptó el nombramiento de un perito independiente para que revise lo incautado por el FBI de la casa del expresidente en Florida.
La Fiscalía le pidió a la magistrada del distrito sur de Florida Aileen Cannon que suspenda la directiva que prohibía a los investigadores continuar revisando los documentos incautados en Mar-a-Lago, en Palm Beach, mientras el fallo sigue su curso ante un tribunal federal de apelaciones, con sede en Atlanta (Georgia).
Alegaron que de mantenerse la directiva, "el gobierno y el público también sufrirán un daño irreparable por la demora indebida en la investigación criminal", dijeron los abogados del departamento en una moción presentada el jueves.
El Departamento de Justicia, que ya había objetado el nombramiento de un "maestro especial", como se denomina a este perito independiente, manifestó en su escrito del jueves que la orden de la jueza Cannon ha detenido de forma temporal aspectos centrales de su investigación criminal.