El primer ministro británico, Boris Johnson, celebra este lunes una reunión de emergencia después de que Francia cerrase sus puertos al transporte del Reino Unido y otros países cancelasen vuelos por temor a la nueva cepa del coronavirus.
Johnson presidirá una reunión del comité de emergencia Cobra, en el que participarán los principales ministros, ante la "significativa alteración" del transporte, sobre todo en el puerto de Dover, en el sureste de Inglaterra, por donde cada día pasan cientos de camiones con carga desde y hacia Francia.
Numerosos países, entre ellos Francia, Bélgica, Italia, Irlanda o Países Bajos, decidieron suspender los vuelos después de que el Gobierno británico reforzara las restricciones de movimiento de la población en Londres y el sureste de Inglaterra por el alarmante aumento de los casos de la covid-19, que los expertos relacionan con una nueva variante del coronavirus altamente contagiosa.
PIDEN A LOS CAMIONEROS QUE NO ACUDAN A DOVER
Ante el previsible caos en el condado de Kent, donde está Dover, las autoridades británicas han pedido a los camioneros que llevan carga que no acudan a esa zona ante una posible congestión.
Con la suspensión por parte de Francia del tráfico con el Reino Unido, las autoridades británicas temen un impacto en el flujo de mercancías, sobre todo de alimentos, procedentes de la Unión Europea (UE) pocos días antes de las fiestas navideñas.
El ministro británico de Transporte, Grant Shapps, ha pedido a la gente, incluidos los camioneros, que eviten acudir a los puertos del canal de la Mancha dado que "esperamos una significativa alteración en el área" y ha agregado que su departamento trabaja con las autoridades locales en Kent para aplicar medidas de contingencia a fin de "minimizar la alteración al tráfico en la zona".
PROBLEMAS PARA LA ENTRADA DE PRODUCTOS ANTES DE NAVIDAD
El Consorcio Minorista Británico (BRC, en inglés) ha advertido de que el cierra al tráfico por parte de Francia puede crear "dificultades" para la importación y exportación del Reino Unido "en un periodo de mucha actividad por la Navidad".
Andrew Opie, director del BRC en el área de alimentos, indicó este lunes que una "prolongada" alteración puede crear también dificultades de cara al final del periodo de transición con el bloque europeo el próximo 31 de diciembre.
"Si bien las mercancías pueden entrar desde Francia, pocas empresas transportistas van a querer enviar camiones y conductores al Reino Unido sin la garantía de que puedan volver a la UE a tiempo (antes de que termine el periodo de transición)", añadió.
"Esta es una ruta clave de suministro de productos frescos en esta época del año", indicó Opie.
Ante esta situación, la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, dijo que es "imperativo" que el Gobierno británico solicite una extensión del periodo de transición con la UE.
El ministro británico de Sanidad, Matt Hancock, admitió en declaraciones a los medios que la nueva variante del coronavirus está "fuera de control" y no descartó que las nuevas restricciones de movimiento tengan que mantenerse varios meses.
La terminal de transbordadores de Dover, en el sureste de Inglaterra, comunicó anoche su cierre al tráfico por las restricciones impuestas en Francia.
Al igual que Dover, el Eurotunnel, que une Reino Unido y Francia a través del túnel por debajo del canal de la Mancha, indicó anoche que ha suspendido el acceso a su terminal de Folkestone, en el sureste inglés, para el tráfico hacia el puerto francés de Calais.
La asesora médica de la Sanidad en Inglaterra, Yvonne Doyle, calificó anoche de "grave preocupación" el alza de los contagios de la covid-19 en el Reino Unido, que llegaron este domingo a 35.928, casi el doble de los contabilizados hace una semana.
Según los científicos británicos, la nueva cepa acelera hasta un 70 % más la transmisión del virus y parece responsable del inquietante incremento de los contagios en Londres y varios condados del sureste y el este de Inglaterra.
Johnson decidió el sábado situar a Londres y el sureste de Inglaterra en el nivel 4 de riesgo -grave-, con el cierre de tiendas que venden artículos no esenciales, gimnasios o cines.