El alero LeBron James volvió a mostrar este martes su lado más "diplomático" cuando habló de lo que significa jugar su décimas Finales de la NBA, las primeras con Los Angeles Lakers, frente a su exequipo de los Heat de Miami, a quienes lideró a dos títulos de liga.
James, de 35 años, segunda temporada con los Lakers, tercer equipo en su carrera a los que lleva a disputar unas Finales, lo hizo anteriormente con los Cavaliers de Cleveland y luego con los Heat, dijo que no quería participar en la asignación de darle un valor especial a las del 2020, que comienzan mañana, miércoles.
"No tiene ningún significado adicional ganar un campeonato, sin importar contra quién estés jugando", comentó James a los periodistas, en vísperas del primer partido. "Ya es bastante difícil llegar a las Finales, estar en esta posición. Si puedes salir victorioso, no importa contra quién lo hagas".
Pero sería su compañero, el pívot Anthony Davis, quien jugará sus primeras Finales de la NBA, el que reconoció que James si sentía, de verdad, una motivación especial al enfrentarse ante su exequipo, y tener la posibilidad de conseguir su cuarto título de campeón.
"Estar de vuelta en las Finales contra Miami, creo, significa mucho más para él ganarlas, que al resto de los compañeros", declaró Davis. "Pienso que este campeonato es probablemente el segundo, detrás del conseguido con los Cavaliers de Cleveland, que más le motiva a James".
James, de 35 años, ganó su campeonato más reciente en el 2016, cuando llevó a los Cavaliers a una remontada de 1-3 en las Finales para vencer a los Warriors de Golden State, dueños de la mejor temporada regular en la historia de la liga, con 73-9.
Los primeros dos campeonatos de James llegaron con el Heat en el 2012 y 2013, primero desmantelando un futuro trío de MVP en el alero Kevin Durant, el base Russell Westbrook y el escolta James Harden con los Thunder de Oklahoma City.
Luego también superaron al pívot Tim Duncan, al base francés Tony Parker y al escolta argentino Manu Ginobili con los Spurs de San Antonio, en siete partidos, gracias a la gran actuación del exescolta Ray Allen, que anotó un triple decisivo.
Davis dijo que el desafío frente a James está en ganarlo todo después de una pausa de 4 meses y medio debido a la pandemia del coronavirus, además de pasar tres meses en la burbuja de Orlando, donde fueron recluidos 16 equipos para concluir la temporada, libre de COVID-19.
"Creo que éste va a ser un campeonato muy difícil", admitió Davis. "La gente dijo que va a ser el más difícil en la historia de la NBA desde un punto de vista mental sólo por las circunstancias".
Algo en lo que las dos estrellas de los Lakers están completamente de acuerdo.
"Probablemente ha sido la cosa más desafiante que he hecho en mi vida como profesional, en cuanto a comprometerme con algo y realmente lograrlo", subrayó James cuando se le preguntó sobre la vida en la burbuja de la NBA.
Sin embargo, admitió que sabía perfectamente a lo que se iba a enfrentar y llegó preparado para el gran reto.
"Sabía cuando venía a lo llegábamos aquí", valoró James. "Sin embargo, mentiría si dijese que conocía la dureza que hemos tenido que superar tanto mental como físicamente, pero la única razón para hacerlo era luchar al máximo en busca de conseguir el título de campeones".
El mismo objetivo que tuvo siempre durante las cuatro temporadas que jugó con los Heat, a los que llevó a disputar las Finales en cada una de ellas, con dos títulos y dos derrotas.
Sin embargo, su salida no fue de la mejor manera, pero ahora, seis años después, ninguna de las dos partes quiere hablar del asunto, y se centran exclusivamente en presentar la buena imagen de cada uno de ellos.
James fue efusivo en sus elogios cuando se le preguntó sobre el presidente de los Heat, el legendario Pat Riley, y el entrenador Erik Spoelstra.
"Cuando escucho a Pat Riley, pienso en una de las mentes más grandes que probablemente haya tenido este deporte", destacó James. "Ha ganado en todos los niveles. Vi la estadística el otro día de que ha sido parte de un campeonato en cuatro décadas. Esta liga no es lo mismo sin Riley".
James dijo que aprendió mucho del legendario exentrenador en la manera como motiva, en saber perfectamente lo que se necesita para ganar, y la manera como lo demostró durante su carrera profesional, en la que ha disputado Finales como jugador, entrenador o ejecutivo en seis décadas consecutivas, más tiempo de lo que Spoelstra, de 49 años, ha vivido.
La estrella de los Lakers también dedicó elogios a Spoelstra, de quien dijo que no se le había dado el reconocimiento que se merece a pesar de lo bueno que es y lo grandes conocimientos que posee.
"Es lamentable que no se haya ganado su respeto después de todo lo que ya ha demostrado", reclamó James sobre Spoelstra, quien va a dirigir sus quintas Finales de la NBA con los Heat. "Es realmente bueno, por no decir genial. Probablemente es genial debido a la preparación que posee".