La Organización de Puertos y Navegación de Irán anunció que el Reino Unido liberará "pronto" el superpetrolero iraní "Grace 1″, cuya retención en Gibraltar desde julio pasado ha provocado una crisis entre ambos países.
El subdirector de la organización, Jalil Eslamí, explicó en rueda de prensa que ambas partes "han intercambiado ciertos documentos" para allanar el camino para la liberación del "Grace 1″, con una carga de 2,1 millones de barriles de petróleo.
Lee también: Wall Street cierra en rojo y despide una volátil semana por guerra comercial
"Esperamos que el problema se resuelva pronto y que el barco pueda continuar navegando con la bandera de la República Islámica de Irán", señaló Eslamí, citado por la televisión estatal.
Según el responsable iraní, los funcionarios británicos "han expresado su disposición a la resolución del problema" de la detención del superpetrolero, llevada a cabo -añadió- en base a "razones poco realistas".
El Reino Unido justificó la captura del "Grace 1″ a principios de julio en las sospechas de que transportaba crudo a Siria, país sujeto a sanciones de la Unión Europea.
Las autoridades iraníes, por su parte, calificaron la detención de "piratería" y aseguraron que el destino del petróleo no es el país árabe.
En respuesta, la Guardia Revolucionaria iraní capturó el pasado 19 de junio en el estrecho de Ormuz el petrolero de bandera británica "Stena Impero", al que acusó de violar las normas de navegación, algo que Londres y la naviera niegan.
Estos incidentes han elevado la tensión en el golfo Pérsico, donde desde mayo se han registrado ataques a petroleros y buques cisterna y el derribo de drones.
Debido a todo esto, Estados Unidos ha propuesto la formación de una coalición naval para escoltar a los barcos en la zona, pero Irán ha advertido de que esta medida puede incrementar las posibilidades de un conflicto.
Al respecto, Eslamí subrayó hoy que Irán está encargado de garantizar la seguridad en la región y que ningún país debe temer por sus barcos, al tiempo que consideró que los intentos de EEUU están condenados al fracaso ya que pocos países parecen dispuestos a unirse a dicha coalición.
El golfo Pérsico y en concreto el estrecho de Ormuz, entre Irán y Omán, son una zona económica estratégica ya que por ella cruza una quinta parte del petróleo mundial.
Las autoridades iraníes han llegado a amenazar con bloquear Ormuz si las sanciones impuestas por EE.UU. tras su retirada del acuerdo nuclear de 2015 les impiden exportar su petróleo, vital para la economía del país.