| Foto: PGR
La Procuraduría General de la República (PGR) informó este lunes que inició el proceso para la captación de datos biométricos de los internos de la Penitenciaría Nacional de La Victoria que serán trasladados próximamente al nuevo recinto que se construye en la comunidad de Las Parras del municipio San Antonio de Guerra.
A través de un comunicado, la entidad precisó que La Nueva Victoria entrará en funcionamiento en los próximos días como parte del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario y que es la primera vez que se instaura en los recintos penitenciarios del país, un sistema la captación de los datos biométricos de los internos.
De igual forma, indicó que los datos a tomar serán las cédulas de identidad de los internos, toma de huellas dactilares y de fotografías de alta resolución para el reconocimiento facial.
El órgano de justicia destacó que el registro de esos datos representa un gran avance en la lucha contra la delincuencia y el crimen, ya que dicha base de datos estará interconectada al sistema de las instituciones de seguridad del Estado, donde se actualizará en tiempo real, garantizando así la información confiable y precisa sobre los datos personales de los privados de libertad.
Resaltó que el novedoso sistema permitirá identificar a los privados de libertad con más rapidez y seguridad, logrando un mayor control y seguimiento desde su ingreso al recinto penitenciario para el cumplimiento de la prisión.
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Sobre la obra levantada en un terreno de 6, 407,083 de m2, la Procuraduría dijo que es la más grande construida en el marco de la implementación del Plan de Humanización para terminar con el hacinamiento y la sobrepoblación que por décadas han afectado a la actual Penitenciaría Nacional de La Victoria, que alberga actualmente a 7,130 privados de libertad, la mayor cantidad del sistema penitenciario nacional.
La institución también destacó que La Nueva Victoria fue construida siguiendo lo establecido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el cumplimiento de las reglas mínimas para el tratamiento de los reclusos, llamadas también Reglas de Nelson Mandela, para garantizar de forma efectiva la rehabilitación y reinserción social de los internos, y con ello cumplir con la finalidad de la pena de proteger a la sociedad contra el delito mediante la reducción de la reincidencia.
En ese orden, dijo que los internos tendrán acceso a programas educativos y a terapias ocupacionales mediante su incorporación a talleres de producción agrícola e industrial, además de que dispondrán de servicios de salud y alimentación adecuada.
La PGR aseguró que la administración y seguridad de esa nueva cárcel estará a cargo de más de 900 agentes de Vigilancia y Tratamiento Penitenciario (VTP), y que contará con un sistema de última generación de cámaras por circuito cerrado.
