Miguel Núñez, médico infectólogo y pastor | Foto: Graciela Cuevas
El doctor y pastor Miguel Núñez aseguró hoy lunes que los casos de COVID-19 aún no han llegado a pico en el país y que prevé que sea a mediados o finales de mayo.
“Bueno yo creo que no hemos alcanzado el pico, definitivamente, hace varias semanas atrás que alguien me entrevistaba y yo le decía que yo esperaba eso para a mediados de mayo, finales de mayo, por una serie de circunstancias”, manifestó.
Durante una entrevista en La Receta Médica, Núñez sostuvo que en definitiva República Dominicana está detrás de Europa y de Estado Unidos, donde los casos llegaron y se expidieron más rápido en comparación con el tiempo en que el país comenzó a recibir el virus, por lo que indicó que solo le quedan de dos a cuatro semanas para alcanzar el máximo de contagios.
“Yo creo que a nosotros nos queda de dos a cuatro semanas todavía, para alcanzar ese pico, el distanciamiento social no ha sido el más estricto, pero yo creo que aún lo que se ha dado, ha contribuido a disminuir la curva en cierto grado, y ahí estamos al día de hoy cuatro mil y pico de casos”, señaló.
En cuanto al nivel de contagiosidad y el nivel de agresividad que puede ser diferente en lugares templados y trópicos, el epidemiólogo expresó que puede ser así por más de una razón, ya que según dijo actualmente los especialistas tienen la teoría de que hay tres sepas del virus: la A, B y C.
El doctor aclaró que la información está por comprobarse, pero se cree que la sepa A que pasó como una gripe, inició en China en septiembre del año pasado, la cual se cree que llegó a California por medio de los pasajeros provenientes de China, donde muta a la sepa B, que tiene mayor carga virulenta y que fue la que se observó en enero en esa parte de Estados Unidos, y pasó a Nueva York.
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“Entonces esa misma sepa que mutó en california se está pensando que posiblemente mutó ahí y se fue a Nueva York, o sea que Nueva York la recibe no de China, sino de la costa occidental”, expresó.
A su juicio, el COVID-19 que está en Nueva York y en toda Europa es la sepa B, a excepción de Italia que se presume le llegó desde Singapur la sepa C, que es un poco más agresiva y por lo cual podría justificar la alta tasa de mortalidad, sin olvidar que también influye otros problemas como la población de envejecientes con morbilidades significativas.
Mientras, que en el trópico, Miguel Núñez presume que por la cercanía a Estados Unidos está circulando la sepa B del COVID-19 y que desde el punto de vista empírico en República Dominicana, pese a que hay personas con coronavirus en intensivos, no se están viendo casos tan grabes con los de EE. UU., Europa y China.
