La Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Santiago ordenó el cumplimiento de seis meses de prisión preventiva, como medida de coerción, contra un cabo de la Policía Nacional imputado de matar a un niño de 11 años de edad, en medio de la celebración del carnaval en Santiago.
La jueza Kimberly Tatis tomó la decisión atendiendo a una solicitud de la Fiscalía de Santiago, que presentó cargos provisionales contra el cabo de la Policía Nacional, Alejandro Castro Cruz y/o Alejandro Castro de la Cruz, de 30 años de edad, a quien le imputa el homicidio voluntario en perjuicio de la víctima, de iniciales D.J.M.T.
Los hechos que se le atribuyen al imputado constituyen una violación a los artículos 186, 295, 186, 304 y 309 del Código Penal Dominicano, los cuales tipifican y establecen sanciones contra el abuso de autoridad en contra de particulares, golpes y heridas, así como homicidio voluntario.
Ante la juzgadora, el titular de la Fiscalía, Osvaldo Bonilla, planteó que se trata de un hecho grave en el que el imputado, tras irrumpir en el lugar donde la familia de la víctima celebraba el carnaval, abusando de la autoridad que le confiere la ley, "violentó todos los protocolos de uso de la fuerza".
El Ministerio Público estuvo representado, además de Bonilla, por las también fiscales Martha González y Rosmari Rosario.
En su investigación preliminar, el órgano de justicia ha podido establecer que el imputado, en una "actitud desafiante y agresiva, portando su arma de fuego visible”, ordena bajar el volumen de la música e intenta ocupar el cajón de música de un vehículo con el que amenizaban el encuentro, por lo que un testigo, atendiendo a esta orden, guardó la bocina en el vehículo.
Pese a ello, refiere el Ministerio Público, el agente policial insistió en llevarse la bocina, lo que desató una discusión, en la cual se involucró el padre del adolescente, Anthony Ysauri Martínez Martínez, a quien el imputado roció gas pimienta en los ojos.
La discusión continuó, cuando el imputado se alejó con la bocina y, sin motivos aparentes, regresa y apunta con su arma manipulada a Martínez y al hacer contacto con este, dispara el artefacto, marca Taurus, 9 milímetros, impactando en el brazo izquierdo y en el tórax al menor de edad, ocasionándole la muerte, establece la Fiscalía.
El Ministerio Público posee elementos probatorios que demuestran la responsabilidad penal que pesa contra Castro Cruz, incluyendo pruebas materiales, documentales, periciales y testimoniales.
Entre las pruebas se incluye el informe preliminar de la autopsia, emitida por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), que determinó que la causa de muerte del niño de 11 años fue "herida por proyectil de arma de fuego, muerte violenta, de etiología médico legal homicida, mecanismo choque hipovolémico".
Por decisión del tribunal, el imputado cumplirá la medida de coerción en la cárcel de Operaciones Especiales, en el municipio Santo Domingo Oeste, provincia Santo Domingo.