Las iglesias cerraron hoy en Santo Domingo, en el primer domingo después de la entrada en vigor del estado de emergencia en la República Dominicana por la pandemia de coronavirus.
La catedral de Santo Domingo e iglesias como Las Mercedes, Los Dominicos o Nuestra Señora de La Altagracia tenían sus puertas cerradas, lo que sorprendió a algunos fieles que llegaron a los templos sin conocer que el Episcopado decidió cancelar las misas esta semana.
Una mujer, identificada como Josefa Vargas, se apresuró a la iglesia de La Altagracia porque oyó tocar una campana, pero se encontró el templo cerrado.
Al no poder acudir a misa, Vargas dijo que regresaría a casa "tranquila otra vez, acatando la misericordia de Dios", aunque sin miedo al coronavirus, a pesar de que iba cubierta con un pañuelo en la cabeza y un tapabocas.
"No tengo miedo, gracias a Dios, sí me preocupo porque sabemos que es una cosa terrible que está pasando, pero quien está en Cristo no tiene miedo", dijo Vargas a Efe.
Otro hombre, que estaba colocando unas plantas en una ventana de la misma iglesia, Rubén Darío Morfa, dijo a Efe que "esta enfermedad ha hecho que la gente tenga temor", porque "son cosas nuevas" que "la gente desconoce".
Varias iglesias, católicas y evangélicas, ofrecieron este domingo sus servicios religiosos por la radio o a través de internet, para evitar grandes congregaciones de feligreses.
La República Dominicana registra ya 202 contagios por coronavirus y tres fallecidos por la enfermedad, según el boletín divulgado este domingo por el Ministerio de Salud Pública.
El pasado jueves, la Conferencia del Episcopado Dominicano ordenó la suspensión de las celebraciones litúrgicas, incluyendo la eucaristía de los domingos, "hasta que cese la situación".
Los templos evangélicos decretaron un cierre de 15 días para prevenir la enfermedad, según anunció el jueves el Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (Codue).
El país está en estado de emergencia desde el pasado jueves, el Gobierno ha decretado el cierre de fronteras y ha clausurado los comercios no esenciales y ha vetado la celebración de actividades culturales o deportivas para tratar de frenar el aumento de los contagios.