El progresista Fernando Haddad, candidato a la Presidencia de Brasil por el Partido de los Trabajadores (PT), volvió a cargar hoy martes contra el ultraderechista Jair Bolsonaro, líder en los sondeos, y se presentó como el "remedio para el fascismo" durante un acto en Río de Janeiro.
En el encuentro "Cultura con Haddad", el progresista recorrió el centro de la capital carioca acompañado de miles de seguidores y volvió a cuestionar la política de Bolsonaro, la cual, en su opinión, estaría centrada en la ofensa a la mujer, quienes "representan el 52 % de la población y carga con el país a la espalda".
"No fueron casualidad todas las manifestaciones que acontecieron el sábado bajo el grito de 'Él no', la población está despertando", manifestó Haddad, en alusión a las concentraciones que reunieron a miles de mujeres en al menos 40 ciudades de Brasil contra las declaraciones consideradas machistas, racistas y homófobas del ultraderechista.
El heredero del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva se presentó además como el "remedio para el fascismo y oscurantismo" que aqueja al país y abogó que Brasil "no quiere más manos armadas", sino "personas con un libro en una mano y un contrato de trabajo en la otra".
Antes del encuentro con sus seguidores en Río, Haddad visitó en prisión a su mentor político y participó en un mitin en la sureña ciudad de Curitiba, donde Lula cumple una condena en segunda instancia de 12 años por corrupción pasiva y lavado de dinero.
Haddad manifestó que Brasil "está viviendo una anarquía jurídica de la que nadie está a salvo", en referencia al embate judicial sobre la posibilidad de que Lula pueda conceder entrevistas desde la cárcel, en principio permitida por el Tribunal Supremo, pero que negó el pedido días después para luego volver a liberarlo otra vez.
"Somos solidarios a los medios (de comunicación) que están siendo impedidos de llevar información al ciudadano", pues "entendemos que una democracia se sustenta con libertad de expresión, de organización, con libertad de prensa", recalcó Haddad.
Según un último sondeo divulgado hoy por el Instituto Ibope, Haddad, sustituto de Lula como abanderado del PT tras la inhabilitación política del exmandatario, se mantuvo estable con un 21 % de la intención de voto, mientras Bolsonaro subió cuatro puntos porcentuales y alcanzó un 31 % de las simpatías.
En una eventual segunda vuelta, que se celebraría en caso de que ninguno de los candidatos obtenga más del 50 % de los votos en la primera, prevista para este domingo, el ultraderechista y el heredero de Lula aparecen técnicamente empatados con un 42 % de los apoyos del electorado.