El Gobierno de Haití ha llamado a la población a la calma y al diálogo ante la protesta nacional convocada para mañana contra la corrupción y la impunidad, ante todo para exigir que se aclare la supuesta gestión fraudulenta de los fondos de Petrocaribe.
En un mensaje televisado, el primer ministro del país, Jean Henry Ceant, señaló que la Policía, que desplegará a 3.000 agentes, tiene instrucciones de garantizar la seguridad de la población durante la marcha e instó "a todos a guardar la calma para que podamos mejorar la situación".
"La gente va a protestar y es algo bueno para la democracia", dijo Ceant, que conminó a celebrar la protesta de forma pacífica y advirtió de que las fuerzas de seguridad actuarán frente a cualquier situación de violencia.
Según el primer ministro, el Gobierno está trabajando para que avancen las investigaciones sobre la gestión de los fondos, e invitó a todos los actores a dialogar "para salvaguardar la estabilidad".
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A menos de 24 horas de la marcha existen muchas incertidumbres en cuanto a la seguridad, mientras los grupos opositores y otros sectores se muestran determinados a salir a la calle e instan a la población a acudir en masa a protestar.
La situación de inseguridad en el país queda patente con el hallazgo esta semana de al menos diez cadáveres entre la basura en una calle de la zona La Saline de la capital, cerca de la sede del Parlamento, según denunció la Red Nacional para la Defensa de los Derechos Humanos de Haití (Rnddh).
Hasta el momento, se desconoce la autoría de lo que la organización denominó como "masacre"; ante la falta de información oficial, han circulado diversas hipótesis al respecto: hay quienes atribuyen las muertes a enfrentamientos entre bandas, y otros acusan a la Policía, según la Rnddh.
Por su parte, la organización de derechos humanos Fundación Je Klere afirma que el número de asesinados es incluso mayor, y denuncia otros hechos criminales, entre ellos violaciones.
Opositores y grupos sociales locales ya han llevado a cabo diversas movilizaciones en meses recientes, la última y más multitudinaria el 17 de octubre, para exigir que las autoridades lleven ante la Justicia a los responsables del supuesto desvío de fondos de Petrocaribe, programa por el cual Venezuela suministra petróleo al país en condiciones blandas.
Investigaciones del Senado haitiano apuntan al desvío de 2.000 millones de dólares de esas partidas por parte de exfuncionarios y responsables de varias empresas para financiar 200 proyectos, pero nadie ha sido procesado por este caso hasta ahora, por lo que la sociedad exige que se lleve a los responsables ante la Justicia. EFE