El Gobierno de Estados Unidos quiere ampliar la recopilación de datos biométricos requeridos a los inmigrantes, lo que incluiría muestras de ADN y el reconocimiento facial, de iris y de voz, informó este martes el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Según un borrador de la propuesta al que tuvo acceso la empresa de comunicación Buzzfeed, el Gobierno podría solicitar en cualquier momento nuevos datos biométricos a los inmigrantes que hayan recibido algún beneficio, como una tarjeta verde o un permiso de trabajo, para garantizar la continuidad de la "investigación de antecedentes" hasta que los inmigrantes se conviertan en ciudadanos estadounidenses.
El Gobierno dijo que quiere nuevos datos biométricos a los inmigrantes que hayan recibido algún beneficio, como una tarjeta verde o un permiso de trabajo, para garantizar la continuidad de la "investigación de antecedentes" hasta que lo inmigrantes se conviertan en ciudadanos estadounidenses.
La propuesta, que se encuentra en borrador y afecta directamente a los inmigrantes que realizan peticiones a través del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (Uscis), también busca ampliar la cantidad de datos biométricos que se toman a los inmigrantes que realizan procesos como ajuste de estatus, peticiones familiares y solicitud de autorización de empleo, entre otros.
Además de los datos que actualmente se toman como huellas dactilares, según la nota, la nueva propuesta permitiría al DHS ir más allá y realizar escaneos del iris del ojo y registrar huellas de la palma de la mano y huellas de voz y tomar muestras de ADN en los casos en que sea necesario verificar la relación familiar, según el borrador.
"Esta regla propuesta elimina cualquier ambigüedad en torno al uso de datos biométricos por parte del Departamento, estableciendo estándares claros sobre cómo y por qué recopilamos y usamos esta información", dijo en un comunicado el subsecretario de Seguridad Nacional, Ken Cuccinelli.
Mientras que, Sarah Pierce, analista de políticas de Migration Policy Institute, dijo en un mensaje por Twitter que la propuesta "es una de las políticas más inquietantes de esta administración".
La abogada de inmigración advirtió que la propuesta "sometería a decenas de millones de no ciudadanos a ser llamados en cualquier momento por agentes de Uscis para un examen biométrico" al que calificó de "invasivo".