Foto: Fundetrop
La Fundación Ecológica Tropical (Fundetrop) solicitó al Gobierno dominicano iniciar un proceso de transformación de las políticas ambientales del país, así como impulsar reformas que permitan a los técnicos en el área a realizar sus labores con mayor independencia y compromiso.
Según un comunicado, al cumplirse el primer mes de que la nueva gestión gubernamental asumiera el poder, la institución valora como positivo que tenga como meta alcanzar el 25 % de energía limpia para el 2030, sin embargo, entienden que en las alocuciones al país del presidente y demás funcionarios en muy pocas ocasiones se refieren al tema ambiental.
Fundetrop argumentó que como lo establece la cumbre de Río 1992, en la declaración de los 27 principios de desarrollo sostenible, el tema ambiental debe ser transversal, es decir, todas las dependencias del Estado deben asumir un compromiso firme de cara a superar los problemas que afectan el planeta y en este caso, la República Dominicana.
La institución ve positivo algunas acciones que se han iniciado desde el Ministerio de Medio Ambiente, producto del mal manejo que dejaron las autoridades pasada, no obstante, esto debe ser parte de un plan consensuado entre el gobierno, la sociedad civil y el sector empresarial para encaminar el país hacia el desarrollo sostenible, combinado lo económico, lo social y lo ambiental.
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Fundetrop explicó que los directivos de la institución ecológica proponen al Gobierno asumir la educación ambiental en todos los estamentos del Estado y que como lo establece la Ley de educación ambiental en las escuelas esta sea unos de los objetivos fundamentales.
Recordó que está pendiente la Ley de Agua que debe ser debatida con transparencia para que no vaya a suceder como en otros países que la regulación de este recurso ha terminado con la privatización del mismo, limitando el acceso de la población al preciado líquido.
Precisó que es importante tener presente que, en la actualidad el país se encuentra en una gran crisis de agua potable, millones de dominicanos no reciben el preciado líquido, y otros lo reciben con limitaciones por lo que entiende que el principal desafío del Estado de cara a los próximos años es garantizar el acceso a un recurso tan vital como el agua.
