Manifestantes protestan en contra de la polémica ley de extradición ante el Consejo Legislativo en Hong Kong, China | Foto: EFE/ Jerome Favre
El Frente Civil por los Derechos Humanos de Hong Kong decidió hoy cancelar la manifestación que había convocado para estesábado tras no recibir permiso de la Policía para organizarla, informó su vicecoordinadora, Bonny Leung.
La Policía había desautorizado esta propuesta y sus organizadores apelaron la decisión sin éxito, por lo que finalmente han optado por cancelarla "para proteger a los manifestantes y asegurar que no hay consecuencias legales para ellos".
"No tenemos otra opción que cancelar la marcha. Nos disculpamos ante la gente pero seguiremos pidiendo a las autoridades que nos dejen convocar nuevas manifestaciones que recogerán nuestras peticiones habituales", añadió.
Según Leung, "es significativo que hayan rechazado la convocatoria de una organización como la nuestra. Es una violación absoluta de los derechos humanos más básicos de la población hongkonesa. No es posible confiar en este sistema".
"No tenemos otra opción que seguir con nuestro movimiento. Está en la naturaleza humana que si las demandas no son escuchadas los hongkoneses se vuelvan más radicales, y eso es algo que el Frente no quiere ver. Por eso seguiremos pidiendo que nos dejen manifestarnos de forma pacífica", agregó.
La decisión de cancelar la marcha se produce horas después de las detenciones de los activistas Joshua Wong y Agnes Chow del partido prodemocrático Demosisto, y del independentista Andy Chan, que elevaron hoy la tensión en la excolonia británica.
Estas detenciones se producen en un momento de máxima tensión en la ciudad, que desde hace doce semanas encadena manifestaciones en sus calles que se originaron por una propuesta de ley de extradición que, en teoría, habría permitido a Pekín acceder a "fugitivos" refugiados en territorio hongkonés.
Tras los arrestos, Demosisto publicó un comunicado en el que acusa a las autoridades de llevar a cabo "redadas a gran escala" para asustar a los manifestantes en una "operación política".
La formación recordó que las protestas de este verano no tienen líderes claros, y llamó a los hongkoneses a "seguir luchando por sus derechos".
Las protestas que vive la ciudad desde hace meses han estado acompañadas de represión policial para aplacar los intentos de los manifestantes de afectar el curso normal de la ciudad con huelgas y ocupaciones de edificios oficiales, comisarías, estaciones de metro o el aeropuerto.
Aunque comenzaron como oposición a un polémico proyecto de ley de extradición, las demandas de los manifestantes se han ampliado y reclaman una mejoría de los mecanismos democráticos de la ciudad.
Por su parte, Pekín asegura que detrás de las protestas existe una "mano negra" y señala a "algunas fuerzas de Estados Unidos" como responsables.
También ha anunciado en diversas ocasiones que las tropas chinas acuarteladas en la ciudad no son "simbólicas" y que "no hay razón para que se queden sin hacer nada" si la situación empeora.
A mediados de este mes, varios vehículos militares chinos se desplazaron hasta la ciudad fronteriza de Shenzhen, donde tropas chinas realizaron una serie de maniobras, algo que desató temores entre la población hongkonesa ante una posible entrada para frenar las protestas.
Tras recuperar la soberanía del territorio de manos británicas en 1997, y bajo la fórmula "Un país, dos sistemas", el Gobierno chino se comprometió a mantener la autonomía de Hong Kong y a respetar hasta 2047 una serie de libertades de las que no gozan los ciudadanos de la China continental.