La red social Facebook suspendió, temporalmente y por segunda vez en menos de una semana, un chatbot del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en esta ocasión por publicar encuestas electorales, algo prohibido en Israel a menos de tres días de la cita con las urnas.
"Trabajamos con las comisiones electorales de todo el mundo para ayudar a proteger la integridad de las elecciones. Nuestras políticas establecen claramente que los desarrolladores deben cumplir con todas las leyes aplicables en el país donde su aplicación está disponible", explicó a Efe un portavoz de la red social.
Según la fuente, el chatbot que opera la página de Facebook de Netanyahu ha quedado restringido hasta la clausura de los colegios electorales esta noche.
El pasado jueves, esta herramienta con la que Netanyahu envía mensajes a los usuarios de forma automática quedó también suspendida después de que difundiera un mensaje que violaba la política del discurso del odio de la red.
"Los árabes nos quieren aniquilar a todos" fue publicado en el grupo de conversación, aunque según su partido, el derechista Likud, el autor fue un empleado que no tenía la autorización del primer ministro israelí, por lo que el texto fue rápidamente borrado.
Netanyahu intensificó hoy su presencia en Facebook para movilizar el voto y subió la alarma al denunciar que la participación estaba aumentando respecto a las pasadas citas electorales en las poblaciones árabes.
Entre las diversas retransmisiones en directo que realizó a través de su página de Facebook, Netanyahu apareció en la estación central de autobuses de Jerusalén alertando nuevamente al público de que el aumento de la participación responde a una mayor movilización del voto árabe, como ya hizo en 2015 cuando aseguró que esa población estaba yendo "a votar en masa".
El Likud anunció una reunión de emergencia, retransmitida también por Facebook, para abordar esta supuesta alta participación solo en comunidades árabes y feudos de los partidos de izquierda, en alusión a la orientación de su principal rival, el centrista Beni Gantz, de Azul y Blanco.
Los candidatos de Azul y Blanco, por su parte, advirtieron de que la participación estaba aumentando en los puntos tradicionales del voto de la derecha, para tratar de movilizar a su electorado.
Más de 6,3 millones de israelíes están hoy llamados a votar en las segundas elecciones que celebra el país en menos de seis meses, sin un claro ganador y que determinará si Netanyahu continúa en el poder, en un quinto mandato.