El deporte escolar va más allá de las competencias intercolegiales. Evaluar el crecimiento de los atletas a través de una serie de pruebas, incluyendo antropométricas, de laboratorio y oftálmicas, permite obtener un diagnóstico respecto al estado nutricional del atleta escolar, trabajando en la prevención y, a su vez, en comprobar los cambios en la composición corporal de manera evolutiva.
Los niños que practican algún deporte en la etapa escolar gozan de un mejor estado de salud y mejoran el nivel cognitivo, ya que adquieren un mejor rendimiento académico y una mayor capacidad de atención; esto sumado a los beneficios a nivel psicológico y social en lo referente a la adquisición de valores como la humildad, el esfuerzo, la disciplina, el compañerismo, el trabajo en equipo, la perseverancia, aspectos que van enlazados con el trabajo académico.
En cuanto al nivel físico, el alumno contará con una mejor forma integral y notará su fortaleza física, reduciendo la posibilidad de sufrir de enfermedades en su etapa de adulto, como la diabetes y problemas cardiovasculares. Además de mantener un peso adecuado.
En el Draft deportivo escolar, desde temprana edad, los alumnos que desean incorporarse a los equipos de las diferentes disciplinas deportivas tienen la oportunidad de evaluarse y ver en qué condiciones físicas se encuentran, a través de:
- exámenes clínicos (oftalmológico),
- exámenes de laboratorio (hemograma),
- pruebas antropométricas (peso, altura, composición corporal),
- pruebas de capacidades físicas (velocidad, agilidad)
- pruebas de habilidades técnicas.
Con la información obtenida, tanto el atleta como los padres, reciben información sobre la disciplina deportiva para la cual el alumno tiene mayor potencial y, en base a la recomendación de los entrenadores, recibir la orientación con la que logrará un mayor rendimiento.
Estos resultados, además, brindan la seguridad de que los potenciales integrantes de los equipos escolares están aptos para la actividad física, evitando futuras lesiones o traumas. Estas pruebas son un requisito indispensable para el siguiente paso: los Tryouts.
En los Tryouts se valoran las condiciones técnico-tácticas de los participantes. Esta valoración es realizada por entrenadores expertos, quienes ofrecen soporte en la definición de los atletas que estarán conformando los equipos de las diferentes disciplinas deportivas de un centro escolar.
El entrenamiento de un atleta escolar debe ser complementado con rutinas de verano, logrando formar estudiantes-atletas que combinen su crecimiento académico con su desempeño deportivo; alcanzando, entre muchos otros beneficios, optar por becas universitarias a través del deporte, para así obtener una educación integral y aportar mejores ciudadanos a la comunidad.