Al final de las operaciones a viva voz en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros de WTI para entrega en agosto se redujeron en siete centavos con respecto a la jornada anterior.
El precio del petróleo baja así por un mayor peso de las previsiones de reducción de reservas petrolíferas que por las esperanzas de que Estados Unidos alcance un acuerdo comercial con China, que podría estabilizar la demanda del combustible.
El temor de los inversores por un conflicto entre EE.UU. e Irán se ha relajado después de que el presidente Trump emitiera nuevas sanciones contra los principales líderes del país ayer lunes.
El Departamento de Energía anunciará mañana el estado de los inventarios de petróleo y los inversores esperan que estos se reduzcan por segunda semana consecutiva.
Sin embargo, sigue presente la preocupación por las tensiones comerciales con China, así como por la posibilidad de una ralentización en el crecimiento económico global.
Los analistas ven con buenos ojos la reunión que el presidente chino Xi Jinping mantendrá con su homólogo estadounidense durante el encuentro del G20, lo que podría significar acercarse al acuerdo entre ambas potencias, pero advierten también de que el mercado necesita un revulsivo más firme.
Además, en el horizonte se encuentra la reunión de la OPEC y sus aliados (incluido Rusia) los próximos días 1 y 2 de julio, donde previsiblemente extenderán su acuerdo de mantener un suministro reducido de petróleo.
El consejero delegado de la petrolera saudí Aramco, miembro de este grupo de productores, afirmó que la producción de 12 millones de barriles diarios es suficiente para cubrir la demanda de los consumidores.
En este contexto, los contratos de gasolina con vencimiento en julio subieron dos centavos y cerraron en 1,87 dólares el galón, y los de gas natural, con vencimiento el mismo mes, permanecieron en 2,30 dólares por cada mil pies cúbicos.