En Estados Unidos hay 4,8 millones de jóvenes obesos de entre 10 y 17 años, y de ellos el 19 % son hispanos, según un informe divulgado este jueves por la Fundación Robert Wood Johnson.
El estudio "Estado de la obesidad: ayudando a los niños a crecer saludables" establece que la tasa general de obesidad para los jóvenes de 10 a 17 años es del 15,3%, pero las cifras no son homogéneas.
"Los jóvenes negros e hispanos corren mayores riesgos que sus pares blancos y asiáticos", dijo Richard Besser, presidente la fundación en la presentación del trabajo.
Según el reporte, todo depende de la raza o capa social a que se pertenezca, y al lugar de residencia.
En el caso de los hispanos la tasa de obesidad es del 19 %, mucho más alta que la de los jóvenes blancos (11,8%), y de los asiáticos (7,3%).
Entre los factores que influyen se destaca la falta de opciones alimenticias saludables, el exceso de restaurantes de comida rápida en los vecindarios hispanos o la falta de parques o espacios verdes para hacer ejercicio.
También influyen las disparidades por nivel de ingresos, porque el 21,9% de los jóvenes en hogares con ingresos por debajo del nivel federal de pobreza padecen obesidad, una cifra muy por encima del 9,4% de los que viven en hogares con ingresos altos.
Por estados, Mississippi tiene la tasa de obesidad juvenil más alta en general, con el 25,4 %, y Utah la más baja, con el 8,7 %.
"Estas diferencias por raza, etnicidad, y geografía no ocurrieron por casualidad", dijo Besser.
"Son el resultado de políticas y sistemas discriminatorios que han existido durante décadas. Sin embargo, tenemos el poder de cambiar estos resultados y hacer de nuestra nación una sociedad más equitativa. Cuanto más comprendamos las barreras para la buena salud, más podemos hacer para cambiarla", agregó.
La fundación reclama que se corrijan los programas de alimentación en los comedores escolares, donde los estándares de nutrición se han relajado y permiten el uso de harinas blancas refinadas, el consumo de galletas, comidas ultraprocesadas y de niveles altos de sodio.
Por otro lado, también señala la importancia de los esfuerzos de prevención de obesidad en las primeras etapas de la vida, porque los niños de 4 años con sobrepeso tienen cuatro veces más probabilidades de ser obesos a los 14 años que los que tienen peso saludable.
La obesidad, que en Estados Unidos es considerada un grave problema de salud pública, incrementa el riesgo de padecer enfermedades como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer, señala la investigación.