Ecuador está a la espera de conocer al rival del candidato correísta a la Presidencia, Andrés Arauz, para la segunda vuelta electoral del 11 de abril, pues con el 97,85 % de las actas procesadas, el indígena ambientalista Yaku Pérez y el centroderechista Guillermo Lasso mantienen una reñida disputa.
Cuando falta por escrutar el 2,15 % de las actas, Arauz obtiene el 32,16 %, seguido de lejos por Pérez, con 19,86 %, y Lasso, con 19,59 %.
Esos porcentajes representan 1.559.386 votos para el candidato del movimiento Pachakutik, que agrupa a indígenas y otros movimientos sociales, y 1.538.535 para Lasso, del movimiento Creando Oportunidades (CREO).
Una ventaja de 20.851 votos para Pérez que, sin embargo, es extremadamente vulnerable, pues hay 5.547 actas con incidencias que requerirán un segundo recuento.
La Ley ecuatoriana establece una segunda vuelta cuando el ganador no obtiene la mayoría absoluta o al menos un 40 % de los votos válidos con una diferencia de 10 puntos porcentuales sobre el segundo candidato.
CONFUSION TRAS EL CONTEO RÁPIDO
El claro triunfo de Arauz en la primera vuelta, como era esperado, ha desplazado la atención al segundo lugar no sólo por la importancia de cada voto, sino también por las esperanzas que despertaron en el movimiento indígena los resultados del conteo rápido realizado por el Consejo Nacional Electoral (CNE), unas cuatro horas después del cierre de los colegios electorales.
El conteo rápido se basa en una muestra de mesas cuyos resultados representan, con margen de error, a la totalidad del electorado.
En una intervención televisada, la presidenta del CNE, Diana Antamaint, anunció los porcentajes que otorgaban el primer lugar a Arauz, seguido por Pérez y Lasso pisándole los talones al líder de Pachakutik.
Sin embargo, minutos después, el vicepresidente del CNE, Enrique Pita, aclaró que había un "empate técnico" entre ambos, pues las actas para el conteo rápido seguían ingresando, es decir que Atamaint había dado datos parciales.
¿FRAUDE?
La confusión alteró los ánimos en un sector del movimiento indígena que incluso habló de un posible fraude.
"Estamos por comprobar una noticia gravísima, pero que es casi seguro. Se está confabulando un fraude entre el Sr. Correa (el expresidente Rafael Correa) y el Sr. Lasso y el Sr. Nebot (Jaime Nebot, líder del Partido Social Cristiano) para impedir que nosotros lleguemos a la segunda vuelta", dijo Pérez este lunes en una rueda de prensa.
Y agregó: "Después del 40 % la tendencia se mantiene, no debería variar, pero hay esta intentona y lo denunciamos al Ecuador. No debemos dejar o permitir que nos roben la voluntad de los ecuatorianos".
Respondía aparentemente a una escueta predicción en Twitter en la que Correa valoraba que: "En la Costa, Lasso supera ampliamente a Yaku. Arauz subirá hasta alrededor del 32,7 %; Yaku bajará a cerca de 19,49 %; y Lasso subirá a cerca de 19,73 %. Final será Arauz-Lasso".
Convencido de una supuesta alianza entre rivales acérrimos con tal de no darle paso a un indígena, Pérez ha reiterado que será él quien dispute la segunda vuelta electoral con Arauz, el candidato impulsado por Correa, quien vive en Bélgica desde 2017, cuando dejó la Presidencia.
Y es que conforme avanza el recuento de votos, la reñida puja se ha ido afianzando, quedando pendiente por contabilizar 861 actasy la revisión de las 5.547 actas con incidencias.
Hasta el momento se han procesado 39.124 actas, de las que se han computado 33.577 y según confirmó a Efe un portavoz del CNE, ya incluyen el voto en el extranjero.
ADVERTENCIAS DE POSIBLE VIOLENCIA
Entre eufemismos ("ojalá no se genere violencia"), Pérez advirtió esta madrugada de la posibilidad de brotes de disturbios y tan pronto como se habló la noche del domingo de un empate técnico, él mismo se desplazó hasta las afueras del centro de mando del CNE, en Quito, con algunos simpatizantes para exigir transparencia en el escrutinio.
Y advirtió que estarán vigilantes no sólo en la capital ecuatoriana sino en todo el país.
El aspirante centroderechista, que inicialmente partía como favorito para acompañar a Arauz a una segunda vuelta, cuenta tradicionalmente con un voto cautivo en su ciudad natal, Guayaquil, si bien se desconoce si ese predicamento se habría visto modificado al entrar en juego el nuevo factor político que representa Pérez.
"Correa tiene un pánico que entremos a segunda vuelta", valoró el candidato indígena, dado que ambos movimientos se enmarcan en la izquierda del mapa político.
CORREÍSMO E INDÍGENAS, ADELANTE EN EL PARLAMENTO
Además de las elecciones presidenciales, más de 13 millones de ecuatorianos estuvieron convocados el domingo para renovar la Asamblea Nacional y aunque el escrutinio de estas actas aún está más atrasado, se puede vislumbrar ya que el correísmo y Pachakutik serán las bancadas más grandes en el Parlamento.
Los ecuatorianos designaron a 137 legisladores: 15 nacionales, 6 por el exterior y 116 provinciales.
Con el 80,02 % escrutado, la alianza 1-5 Unión por la Esperanza (correísmo) obtiene el 27,93 % de los votos, seguida por Pachakutik con 19,97 %, Izquierda Democrática con 13,35 % y el centroderechista CREO con 10,25 %.
El resto de movimientos y partidos políticos no supera el 5 % cada uno, cuando aún faltan por revisar, además, 6.213 actas que presentaron algún tipo de novedad
IMÁGENES APOYOS DE LA VOTACIÓN TOTALES Diana Atamaint, presidenta del CNE , cedidas por el CNE Y Yaku Pérez, candidato presidente del Ecuador