El serbio Novak Djokovic ha recuperado la sonrisa y el liderazgo del tenis mundial, reforzado este jueves con su clasificación a los cuartos de final del Masters 1.000 de París tras el abandono del bosnio Damir Dzumhur, una situación que él mismo no hubiera imaginado hace cinco meses.
"Si me hubieran dicho hace cinco meses esto… Siempre he creído en mí, pero era tan improbable en aquel momento, cuando estaba en el puesto 22 del mundo y con la forma en la que jugaba y me sentía en la pista", dijo el serbio, que ganaba 6-1 y 2-0 cuando abandonó su rival.
Djokovic, que recuperó a su entrenador Marian Vajda, aseguró que trabaja cada día para "construir la confianza" y que siempre supo que podía recuperar su mejor juego.
"Pero ha sido rápido, creo que es una hermosa aventura", señaló el tenista, que recuperará el número uno del mundo tras el abandono del español Rafael Nadal en París.
Djokovic dijo estar "orgulloso", aunque señaló que su concentración está en ganar su quinto Masters 1.000 de París, un torneo en el que este jueves firmó su trigésima victoria, más que nadie.