La Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) inició un intenso programa de entrenamiento físico a sus agentes, para que estos sean más eficientes en el servicio y en el trato a los ciudadanos.
Un comunicado indica que la preparación física de los agentes se prolongará por más de tres meses e incluye charlas sobre cómo mantener el control de situaciones, manejo de la ira, control emocional, disciplina, cortesía policial, sin que sea necesario usar la violencia, aun cuando los conductores pierdan el control.
La primera charla la ofreció, durante el acto de inicio, el director general de la Digesett, el general de brigada Ramón Antonio Guzmán Peralta, P.N.
Guzmán Peralta explicó a los agentes que para detener y fiscalizar a un conductor que ha violado la Ley No. 63-17, de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial tienen que seguir un protocolo que se divide en varias reglas del uso de la fuerza.
Agrega que la primera regla es la presencia del policía, para que el ciudadano sienta que está al frente de una real autoridad para hacer cumplir la Ley.
La segunda fase del protocolo es la comunicación, es decir, indicar al conductor porqué lo están deteniendo y detallando el artículo de la Ley 63-17 que violó, pero siempre respetando los derechos del ciudadano.
La tercera parte del protocolo es, de ser necesario, es más con la distancia de la tomfa, la cual evita el contacto físico del ciudadano con el agente, además se puede usar como medio para neutralizar a una persona que se salga de control. El general Guzmán Peralta recomienda que durante todo el proceso del protocolo de detención debe haber una distancia física prudente entre el agente y el ciudadano; jamás el policía puede devolver los insultos que le pudiese hacer un conductor molesto.
“El agente de la Digesett no se puede igualar al ciudadano, él es una autoridad y siempre debe mantener su control emocional”, dijo Guzmán Peralta.
Protocolo de salud
La preparación física de los agentes de tránsito está a cargo de un equipo de entrenadores, dirigido por el experimentado mayor retirado de la Policía Nacional Franklin Encarnación Thomas.
Este equipo es experto en artes marciales, técnicas policiales de uso de las macanas o tomfa para rápido control de ciudadanos que se insubordinen a las autoridades.
El adiestramiento físico de los miembros de la Digesett se realiza siguiendo un estricto protocolo de salud por el covid-19: distanciamiento, todos usan mascarillas, chequeo médico constante.
Asimismo estos entrenamientos se hacen con la supervisión de un equipo médico perteneciente al departamento de Servicios de Salud de la Digesett, donde al inicio de los entrenamientos se les hizo la prueba del COVID-19 a todos los instructores y participantes, además de que se guarda todas las medidas de sanitarias para evitar el contagio.