La ciudad de Detroit (EE.UU.) se prepara para despedir a su hija adoptiva, Aretha Franklin, la Reina del Soul, con un funeral comparable al de los héroes del movimiento en defensa de los derechos civiles del país.
Franklin, fallecida el 16 de agosto a los 76 años, es conocida mundialmente por su voz y talento musical, pero su vida estuvo intensamente ligada al movimiento de los derechos en Estados Unidos y la lucha feminista, por lo que su familia ha querido que sus exequias reflejen este vínculo.
Las autoridades de Detroit y el Museo Charles H. Wright de Historia Afroamericana de la localidad, donde los restos de Franklin serán expuestos al público el martes y el miércoles, ofrecieron hoy nuevos detalles sobre los actos de homenaje a la cantante, que culminarán el viernes con su funeral.
Se espera que decenas de miles de personas acudan al museo, el mismo en el que fue expuesto en 2005 tras su fallecimiento el cuerpo de la activista de los derechos civiles Rosa Parks, que en 1955 se negó a levantarse del asiento de autobús reservado a los blancos en el que se había sentado en la Alabama segregacionista de entonces.
La capilla ardiente de Franklin estará abierta en el museo, que la cantante le gustaba visitar, durante doce horas el martes y miércoles para permitir que el máximo número de personas se despidan.
Las autoridades advirtieron hoy a quienes planean acudir al Museo de Historia Afroamericana de Detroit que se prevén largas colas.
El jueves, el cuerpo de Franklin será trasladado a la iglesia baptista New Bethel, el templo de Detroit donde su padre, Clarence LaVaughn Franklin, ofició como pastor entre 1946 y 1979, cuando falleció por dos disparos durante un intento de robo de su casa.
También el jueves se celebrará en la ciudad un concierto en honor a Franklin.
Su funeral se celebrará el viernes en Greater Grace Temple, una iglesia en la zona este de Detroit con capacidad para sentar a 4.000 personas y que fue el lugar donde en 2005 se desarrollaron las exequias de Rosa Parks.
La familia de Franklin ha anunciado que el expresidente de EE.UU. Bill Clinton (1993-2001) será uno de los oradores que intervendrán en el funeral, al que solo han sido invitados la familia y amigos de la cantante, así como personalidades del mundo de la política, la música y los derechos civiles.
Según han informado los parientes y la representante de Franklin, el antiguo fiscal general de EE.UU. Eric Holder, el cantante Smokey Robins y los reverendos Jesse Jackson y Al Sharpton también intervendrán durante la ceremonia.
El servicio religioso también contará con numerosas estrellas del mundo de la canción, entre ellas Stevie Wonder, Faith Hill, Ronald Isley, Chaka Khan, Jennifer Hudson y Fantasia.
Tras la ceremonia, Franklin será sepultada en el cementerio de Woodlawn en Detroit, junto con varios miembros de su familia, incluido su padre. Woodlawn es también el lugar donde descansan los restos de Parks.
Franklin falleció en su casa de Detroit, víctima de un cáncer de páncreas que había mantenido con suma discreción.
Nacida en Memphis (Tennessee), pero criada en Detroit, donde su familia se mudó cuando tenía cuatro años, la artista se ganó en 1967 el título de Reina del Soul tras la aparición ese año de su versión de la canción de Otis Redding "Respect", que se convirtió en himno de la resistencia de la población negra estadounidense y, en particular, de la lucha por la igualdad de las mujeres.
Con solo 16 años, Aretha recorrió el país con el reverendo Martin Luther King y cantó en su funeral tras su asesinato en 1968.
Franklin también tuvo un lugar destacado en la toma de posesión del primer presidente negro de Estados Unidos, Barack Obama, a quien deleitó en 2009 con su interpretación de "My Country 'Tis of Thee" frente al Capitolio.
La importancia de Franklin tanto en el mundo de la música como en los últimos 60 años de la historia de EE.UU. ha hecho que Detroit se vuelque en su funeral.