La llegada de Daryl Morey a la organización de los Sixers de Filadelfia como nuevo presidente de operaciones se hizo sentir de inmediato con los traspasos del pívot dominicano Al Horford y el alero Josh Richardson durante la jornada de celebración la pasada noche del sorteo universitario.
Sin ningún jugador de interés especial que seguir en el sorteo universitario de la NBA, que dejó al escolta Anthony Edwards, de 19 años, como el nuevo número uno, elegido por los Timberwolves de Minnesota, los Sixers antes ya habían cerrado dos traspasos importantes.
El primero, el de Horford, de 34 años, que lo enviaron a los Thunder de Oklahoma City por el escolta Danny Green, quien acababa de ser traspasado por Los Angeles Lakers, a cambio del base alemán Dennis Schroder que llegó a formar parte de los nuevos campeones de la NBA.
Morey, que había dicho el pasado mes de octubre que dejaba la gerencia general de los Rockets de Houston para pasar más tiempo con su familia, cambió de inmediato de pensar y planes al aceptar la oferta de ponerse al frente de los Sixers e iniciar una nueva etapa que los pueda hacer más competitivos y luchar por el título de liga.
Green y el joven de 22 años Terrance Ferguson, quien también entró en el traspaso de Horford, será de gran ayuda a la defensa de los Sixers, una de las debilidades que tuvieron la pasada temporada.
Mientras que confirmó que no tenía ningún interés en mantener a dos pivotes All-Star en el equipo, especialmente cuando a Horford le quedaba un contrato por tres años más del que firmó la pasada temporada por cuatro y 97 millones de dólares.
Más tarde, también cerró la llegada del base Seth Curry, de los Mavericks de Dallas, a cambió del alero Josh Richardson, con el objetivo de potenciar la eficacia de los tiros desde fuera del perímetro, donde las estrellas de los Sixers, el base australiano Ben Simmons y el pívot camerunés Joel Embiid, no son especialistas.
La novedad, al margen de la calidad que posee Curry, hermano de la estella de los Warriors de Golden State, Stephen Curry, es que está casado con la hija del nuevo entrenador de los Sixers, Doc Rivers, quien hasta la pasada temporada fue el entrenador de Los Angeles Clippers.
Seth Curry ocupa el segundo lugar en la historia de la NBA en porcentaje de triples de carrera (44,3), solo detrás del actual entrenador de los Golden State Warriors, Steve Kerr, y cuatro lugares por delante de su hermano, el dos veces Jugador Más Valioso (MVP) de la liga, Stephen Curry.
Curry, de 30 años, promedió 12,4 puntos por partido para los Mavericks la temporada pasada en el primer año de un contrato de cuatro y 32 millones de dólares. Tuvo un 45,2% de cierto el mejor de su carrera, con los tiros desde fuera del perímetro.
Richardson, quien promedió 13,7 puntos por partido la temporada pasada después de llegar a Filadelfia en el acuerdo de firma e intercambio de Jimmy Butler con los Heat de Miami, encaja con el deseo de Dallas de mejorar en el apartado atlético y convertirse en un mejor equipo defensivo esta temporada baja.