Daniel Pou | Foto: Kelvin de la Cruz
El politólogo Daniel Pou Suazo consideró que el proyecto de partidos, agrupaciones y movimientos políticos, convertida en ley este jueves con la aprobación del Senado de la República, no es la pieza perfecta, pero sí la necesaria para comenzar a regular a los partidos políticos del país.
Dijo que el país esperaba desde hace muchos años la aprobación de esta pieza legislativa, y que solo falta la promulgación por parte del presidente de la República para convertirse en ley definitiva.
El analista político indicó que la ley de partidos había creado muchas expectativas, producto de la falta de agenda que tiene el Estado dominicano tradicionalmente de establecer controles y mecanismos de rendición de cuentas y supervisión, sobre todo en instituciones de tanta importancia como son los partidos políticos.
Precisó que la falta de establecimiento de controles a los partidos políticos es un gran déficit que se suma a los elementos de la debilidad institucional que lamentablemente, en muchos ámbitos de la vida nacional, afectan la estructura del Estado.
Subrayó que los partidos son instituciones privadas, pero que tienen un estatus especial en su vínculo de Estado-ciudadanía, ya que son el puente expedito para que la sociedad exprese su voluntad libérrima al momento de elegir a los gobernantes y autoridades.
Si usted tiene un partido político tiene que demostrar voluntad de poder o de lo contrario haga un club de amigos”, afirmó.
Pou Suazo espera que la ley de partidos políticos, aprobada por ambas cámaras legislativas, sea promulgada por el presidente de la República y sobre todo que las instancias institucionales que deben hacer valer su espíritu, estén invertidas de la voluntad política y la convicción suficiente para que este código se aplique de una manera democrática por igual para todos.
Inconstitucionalidad del proyecto
El también experto en seguridad ciudadana señaló que algunas personas se han manifestado sobre ese punto de diferentes formas.
Sin embargo, entiende que el tema de las primarias en las organizaciones políticas, tratándose los partidos de instituciones privadas de interés público, ninguna ley puede establecer el método democrático que debe asumir u optar para elegir sus candidatos a cargos electivos.
Pou Suazo cree que hay una cierta predisposición, pero que hay partidos que tienen sus tradiciones y sus propios métodos para la escogencia de sus candidatos, en tal sentido puso como ejemplo al Partido de la Liberación Dominicana (PLD), que tenía un procedimiento para esos fines.
No obstante, explicó que el principal problema está en el espíritu de los partidos políticos, y que la escogencia de los candidatos no se resuelve con una ley, sino que hay problema de fondo en las organizaciones políticas, pues no están aplicando la democracia: “Eso no se va a resolver con una ley o un procedimiento de selección de autoridades y candidatos”.
Afirmó, en ese orden, que los partidos políticos tienen que hacerse una revisión realmente de su esencia, de función y de sus responsabilidades frente a la sociedad.
“La ley de partidos no va a resolver la crisis de los partidos políticos, sino que regulará aspectos que en la actualidad no tienen ningún tipo de control”, enfatizó.
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Sobre conveniencia de la ley a RD
El politólogo expuso que todo lo que contribuya a regular a los organismos y organizaciones que están fuera de control es positivo.
Dijo que quizá no es la ley ideal y que está bastante seguro de eso, pues tenía una idea diferente a la pieza aprobada por el Congreso Nacional, pero que puede servir de punto de partida para que luego algunos aspectos más medulares sean discutidos de nuevo y se produzcan las enmiendas necesarias.
En tal sentido, explicó que hay un tema fundamental sobre la propia existencia de los partidos políticos, su pertinencia y una serie de regulaciones que tienen que ver con las alianzas.
Argumentó, en ese orden, que hay partidos políticos que se han pasado la vida siendo soporte de los grandes partidos y no han demostrado vocación de poder, pues sencillamente se colocan bajo la sombrilla de uno de ellos: “Eso hay que irlo eliminando. Si usted tiene un partido político tiene que demostrar voluntad de poder o de lo contrario haga un club de amigos”.
Aseveró que las entidades políticas tienen que ser propositivas, es decir, que deben tener programas de gobiernos factibles y veraces, no propuestas inventadas, sino formular políticas durante las campañas.
