El Gobierno cubano afirmó este lunes que EE.UU. buscó "fórmulas" para que Cuba participase en la Cumbre de las Américas "pero no en pie de igualdad".
El ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, aseguró en una entrevista en la televisión estatal que todas estas propuestas recibieron el "enérgico rechazo de la parte cubana".
"Se empieza entonces a intentar presentar a terceros países ideas, formulas, mediante las cuales Cuba pudiera participar en la cumbre, pero no en pie de igualdad", explicó.
Agregó que EE.UU. se embarcó en una serie de "negociaciones turbias" con "presiones" varias sobre líderes y gobiernos para buscar "fórmulas discriminatorias de participación de Cuba".
Rodríguez consideró que la cita de la semana pasada en Los Ángeles nació "frustrada" por la "arrogancia" y la "imposición autoritaria y hegemónica" de Washington, una "decisión estratégica fatal".
Estados Unidos, "en lugar de rectificar", jugó a la "opacidad" mientras por parte de otros países se llevaron a cabo "intentos firmes, pero constructivos" de incluir a La Habana en la cumbre.
En su opinión, Estados Unidos "no tiene una sola razón para excluir a nadie" ni "tiene derecho por ser anfitrión" para decidir quién puede asistir a la Cumbre de las Américas.
Esta controversia por la exclusión ha sido una "batalla victoriosa" para Cuba y un "fracaso más del imperialismo en nuestra América", afirmó el canciller.
Rodríguez aseguró que "en este momento" está "en entredicho" que vaya a haber una nueva Cumbre de las Américas tras el "fracaso" de ésta, marcada por las exclusiones de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Su país, agregó, estaría dispuesto a participar en una próxima Cumbre de las Américas, siempre sobre la base de un "diálogo productivo y respetuoso" entre iguales.
Subrayó que su país tiene interés en participar en los foros regionales, pero no de cualquier forma: "Cuba no tiene los temores y complejos de acudir a discutir con EE.UU. lo que sea sobre bases de respeto".
A este respecto, destacó la importancia de los "mecanismos de integración", pero indicó que Cuba no aspira a integrarse con EE.UU.: "Ése no es nuestro camino".
Rodríguez destacó además que se trata de la primera vez que se escenifica un rechazo tan fuerte en el hemisferio ante una decisión de EE.UU.
El canciller reiteró el agradecimiento de su país a las naciones que mostraron su rechazo a los vetos estadounidenses, de los líderes que declinaron asistir (México, Bolivia, Honduras, San Vicente y las Granadinas) y de los que criticaron las exclusiones (Argentina, Chile).