El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE) y las comunidades cristianas se unieron al clamor de la clase médica dominicana y el personal del sector salud, ante la situación alarmante y preocupante por la epidemia del dengue, lo que puede llevar a la nación a un estado de emergencia y situaciones lamentables.
El pastor Feliciano Lacen, presidente de la entidad evangélica, dijo que el incremento de los casos dengue es evidente en sectores de diferentes clases sociales de la provincia de Santo Domingo y SD Este (Ensanche Isabelita-reciente) donde niños están perdiendo la vida, sumando esto al aumento de las emergencias en los hospitales y clínicas, lo que está produciendo cansancio y estrés en el personal médico que no soporta y que no tiene capacidad de respuesta ante esta emergencia sanitaria.
"Ante las muertes por dengue de niños de diferentes edades, dos de ellos de trece y ocho años, hijos de facultativos, ocurridas en las últimas semanas, el gobierno junto al Ministerio de Salud Pública, debe disponer de los recursos económicos, humanos y de espacios para atender las necesidades y dar una respuesta rápida a la población. No solo aumentar la disponibilidad de camas en los servicios de salud, sino ir a la raíz del problema", dijo el representante de Codue.
El presidente del Codue es de opinión de que así como el gobierno invierte recursos para la implementación de programas y proyectos se debe cumplir con la Constitución y las leyes en el entendido de garantizar el derecho a la salud como una aspiración sagrada de la dignidad humana creada a “imagen y semejanza de Dios”.
"Motivamos a la población a tomar las medidas preventivas de lugar, al gobierno y las entidades del sector salud a tomar esta situación más en serio, al ministro de Salud Pública y todas las agencias a unificarse en un solo cuerpo con la ayuda de las iglesias, juntas de vecinos, clubes deportivos, políticos, empresarios, personas que les duele la nación; a fin de enfrentar con efectividad esta situación y así seguir garantizando la vida de nuestros niños que son los más vulnerables ante este brote mortal. Trabajar en jornadas de limpieza y fumigación, higienización con cloro, utilizar mosquiteros para así prevenir mayores males en las familias dominicanas y combatir esta realidad", añadió el pastor.