El Comité Nacional de Lucha Contra el Cambio Climático (CNLCC) aseguró que los daños producidos en las plantas de AES Andrés no fueron por causados un rayo, sino por la falta de mantenimiento.
A través de un comunicado publicado en su página de Facebook, el CNLCC mostró más de 40 fotografías a la prensa nacional e internacional sobre el daño a las plantas de AES Andrés.
La entidad afirmó, además, que el Gobierno y la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (Cdeee) "presionaron" a AES para que no sacaran sus plantas de servicio para fines de mantenimiento y así evitar incrementar los apagones y comprar electricidad más cara de generadores que operan con combustibles de petróleo, como actualmente hace para paliar el colapso del sistema eléctrico nacional.
"De manera irresponsable y abusiva, ahora Rubén Jiménez Bichara, vicepresidente de la Cdeee, está cobrándole a AES el sobreprecio del costo de la electricidad que se le está comprando a los generadores con la cual se está cubriendo el déficit dejado por la salida de sus plantas", aseveró.
Señaló que como se muestra en las fotografías, es imposible que un rayo produzca ese desastre tan extenso en esas plantas. "AES intentó disimular la verdadera causa para protegerse ella y a sus socios del Gobierno y de la Cdeee", sostuvo.
Punta Catalina
"Ahora están sin pito y sin flauta, sin estos recursos y sin que Punta Catalina comience a operar en medio del apagón. Peor aún, no saben cuándo la primera de las dos plantas será prendida y comenzará a generar electricidad, pese a los reiterados anuncios de fechas que oscilan entre diciembre de este año hasta febrero del año próximo", apuntó.
El CNLCC detalló que hasta que el Gobierno y la Cdeee paguen los US$710 millones que adeudan a los suplidores de los equipos eléctricos, será "muy difícil" que Punta Catalina pueda ser terminada y que una de sus plantas comience a operar.
Dijo además que la empresa Tecnimont y los suplidores se niegan a seguir colaborando con la construcción de la central termoeléctrica hasta que el Gobierno y la Cdeee honren el pago de las deudas que son parte del presupuesto de la obra y no sobrecosto como es en el caso de la reclamación de Odebrecht.
"La empresa italiana Tecnimont teme que sea ella que cargue con la deuda si se concluye la obra sin que se les pague a los suplidores eléctricos que son principalmente fabricantes estadounidenses, porque ella sirvió de aval para la adquisición de estos equipos", precisó.