El Banco Caribe realizó la Segunda Jornada de Donación de Sangre con la cual totalizó con este nuevo año la integración de cerca de 200 colaboradores de la entidad financiera.
A través de un comunicado indicó que el objetivo es crear una cultura de donación voluntaria y recurrente que ayude a aumentar la disponibilidad de este importante líquido ante situaciones de emergencia, en el marco de su programa de responsabilidad social corporativa.
La actividad se llevó a cabo en la sede central de la institución, con el acompañamiento técnico-médico de Referencia Banco de Sangre, a través del programa de “Voluntario Donante” que ejecuta el Voluntariado Caribe.
Además de estas dos primeras jornadas, Banco Caribe efectúa desde el 2018 un amplio proceso de capacitación e información a su personal sobre la importancia de ser donantes voluntarios, recurrentes y responsables para que exista sangre segura disponible y a tiempo, contribuyendo de esta forma a salvaguardar vidas.
Para asegurar el éxito de esta jornada, la entidad se apoyó de diferentes recursos y herramientas de comunicación, las cuales permitieron implementar una cultura de donación voluntaria y que la misma alcanzara un número significativo de colaboradores, a través de una campaña que llevó por nombre “Sangre segura para todos”.
“La donación de sangre permite salvar la vida de embarazadas, pacientes en estado de gravedad y personas con complicaciones de salud. Nos sentimos orgullosos de nuestros Donantes Voluntarios y su disposición al servicio comunitario”, manifestó Isleyda Peña, vicepresidente de Estrategia Comercial de Banco Caribe.
La ejecutiva bancaria expresó que “la sangre es el regalo más valioso que le podemos ofrecer a otra persona. La decisión de donar sangre puede salvar una vida, o incluso varias si esta se separa por componentes como glóbulos rojos, plaquetas y plasma, que pueden ser utilizados individualmente para pacientes con necesidades específicas”.