Ingeniero Roberto Castillo Tió. Foto Yohan Castillo.
El ingeniero Roberto Castillo Tió consideró este domingo que los problemas de crisis de agua en República, más que de leyes, es de gestión en la aplicación de política, de voluntad y de cumplimiento.
Afirmó que el uso del agua a nivel nacional en el sector industrial es de unos 659.98 millones de metros cúbicos anual, que representa aproximadamente un 5% de todo el agua de República Dominicana, mientras el turismo representa el 0.3% de esa cantidad.
En tanto que el agua pecuaria o de riego representa el 50%, según datos del año 2015, y para el año 2025 se proyecto que la demanda de agua potable para consumo humano será de un 7% y para riego de un 47%, para la pecuaria de un 13% y en el turismo un 1%, mientras en la minería e industrias se considera que sería de un 5%.
Explicó que relativamente la demanda de agua para el sector pecuario va demasiado acelerada relativamente.
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Castillo Tió previó para el año 2025 de las cinco cuencas hidrográficas principales que tiene el país, dos presentarán problemas graves para el suministro de agua, que son las regiones Yaque del Norte y la Issa-Ozama.
De la Yaque del Norte se estima, según puntualizó, que para el 2025 tendrá disponible aproximadamente 1,825 metros cúbicos anual por habitante, y la Issa-Ozama, que se prevé tendrá disponible 907 millones de metros cúbicos por año.
Afirmó que esta situación descrita lo que demanda es una mejor gestión del recurso agua, aumentando la eficiencia en el renglón de riego, cuya eficiencia es de un 19%, mientras en agua potable es de un 40% como máximo.
Al participar en un panel junto a otros profesionales de la agronomía y la hidrología en el programa Los Sabios en la Z, que por la Z101.3 FM y en ZTV por YouTube, que produce el ingeniero Ramón Alburquerque, Castillo Tió precisó que en el sector industrial la demanda y uso de agua es apenas de un 5% del total, ya que es un sector de bajo consumo porque es una industria de manufactura, no procesadora.
No obstante, dijo que todo dependerá del estilo de desarrollo que apliquen los gestores de políticas.
Opinó que la crisis del agua, más que de agua, es de gestión, de cumplimiento, voluntad y de aplicar el rigor científico en cada caso.
