La Casa Blanca advirtió ayer viernes de que la investigación de la trama rusa que rodea al presidente estadounidense, Donald Trump, socava la relación entre Washington y Moscú, después de que el mandatario optase por cancelar su reunión con el presidente ruso, Vladímir Putin, durante la cumbre del G20.

"La caza de brujas de la trama rusa, que ojalá esté llegando a su fin, lo está haciendo muy bien. Desafortunadamente, probablemente socava nuestra relación con Rusia", dijo a los periodistas en Buenos Aires la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders.

Asimismo, la portavoz de la oficina presidencial reiteró que la razón de la cancelación del encuentro entre Trump y Putin, previsto para el 1 de diciembre en la capital argentina, es la polémica generada entre Rusia y Ucrania en los últimos días.

Sin embargo, los medios locales estadounidenses han señalado en las últimas horas que Trump optó por anular su reunión con Putin después de que su exabogado personal Michael Cohen admitiera ante una corte federal que engañó al Congreso sobre los detalles de un negocio inmobiliario del magnate en Rusia "por lealtad".

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Cohen se presentó por sorpresa este jueves por la mañana en una corte federal de Manhattan (Nueva York) y se declaró culpable de un nuevo cargo de la Fiscalía especial que encabeza Robert Mueller y que investiga los vínculos entre la campaña electoral de Trump en 2016 y el Kremlin.

El encuentro entre Trump y Putin iba a ser el primero entre ambos desde la cumbre del pasado julio en Helsinki, y Rusia quería aprovecharlo para hablar sobre desarme nuclear, la lucha antiterrorista y Siria, entre otros temas.

Pero la crisis generada el pasado fin de semana con Ucrania cambió el panorama y suscitó duras críticas desde Washington, aunque no tanto del propio Trump, quien evitó condenar directamente a Rusia y a primera hora de ayer opinó que este era "un muy buen momento" para volver a reunirse con Putin.

Trump cambió de opinión un par de horas más tarde, después de hablar a bordo del Air Force One con su secretario de Estado, Mike Pompeo; su jefe de gabinete, John Kelly; y su asesor de seguridad nacional, John Bolton, quien conversó con ellos desde Brasil.

"Esperemos que esto se resuelva pronto, y así las conversaciones productivas puedan comenzar", dijo hoy al respecto Sanders.

En las últimas horas, funcionarios rusos habían especulado con la idea de que Trump y Putin tendrían un encuentro en los márgenes del G20 de menor calado, aunque Sanders desmintió esa opción y aseveró que no hay ningún tipo de reunión programado con el mandatario ruso.

Esta es la primera vez que el grupo de las 20 economías más desarrolladas y emergentes del mundo reúne a sus líderes en Suramérica, y Argentina quiere llegar a acuerdos sobre el futuro del trabajo, infraestructura para el desarrollo y un futuro alimentario sostenible.