| Foto: Fecebook Demetrio Castro Mantolio
El cardiólogo y salubrista de la provincia de Montecristi, Demetrio Castro, aseguró este miércoles que se están diagnosticando como infartos miocardio a pacientes que han muerto por etapa final de COVID-19.
“Yo asumo que son etapas finales, son etapas finales del Covid-19 porque son pacientes que han estado con dificultad respiratorias, con tos productiva o tos seca, fiebre y al final de proceso han parecido que es un infarto”, aseguró al explicar que estos últimos días se han diagnosticado muertos por infartos miocardio.
Durante una entrevista telefónica en el segmento Hablan los Cirujanos de La Receta Médica, Castro sostuvo que en estos tres meses ha visto más muertes por infartos que en los últimos cinco años que tiene en el ejercicio médico privado y que dichas muertes se están confundiendo.
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“Entonces eso lo que revela, es que no estamos teniendo respuesta en nivel secundario y terciario del sistema, entonces existe la necesidad de que haya un reenfoque de la atención a la epidemia porque de lo contrario van a continuar los enfermos y la mortalidad va a ser sumamente alta en la República Dominicana”, manifestó.
El salubrista también reveló que la pandemia ha evidenciado que el sistema de atención primaria en República Dominicana está en “pañales” y que la atención al COVID-19 debió de estar orientada a la prevención primaria y secundaria.
A su juicio, la prevención primaria está orientada a evitar que la población se enferme y a evitar que el virus comenzara a circular a nivel comunitario, donde el equipo fundamental para eso eran y siguen siento los médicos de la unidades de atención primarias quienes debían identificar los enfermos por medio de pruebas PCR y para luego aislarlo.
Castro dijo que uno de los problemas fundamentales que tienen en Montecristi es que la prueba de PCR, se toma en la provincia para luego enviarla al laboratorio nacional, hecho que según dijo se toma cuatro horas en vehículo privado, y por lo que dijo que los médicos de atención primaria no han recibido de las autoridades de Salud la capacidad adecuada para dar seguimiento a los pacientes contagiados por el virus.
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“Porque ahora estamos en una etapa donde la intención tiene que ser en el territorio, ya el virus está circulando a nivel nacional, el aislamiento ya no tiene ningún sentido de pueblo, ni de ciudades, el aislamiento tiene que hacerse allí donde está el enfermo”, argumentó al tiempo de indicar que hay que seguir haciéndose pruebas rápidas y de PCR.
En cuanto a la prevención secundaria, el doctor precisó que allí una vez detectado el enfermo se debe evitar que muera, y que en provincias alejadas como Montecristi la población no tiene acceso a las pruebas y que los especialistas no tienen un nivel de referencia local donde puedan mandar a los posibles contagiados.
“Entonces no tenemos respuesta en el nivel primario, entonces tampoco estamos teniendo respuestas en el nivel secundario y ocurre que en provincia como la mía, la provincia de Montecristi y toda la frontera, es una población muy pobre y cuando el paciente es referido a un hospital de referencia regional o un hospital de referencia nacional, sencillamente esa población no acude”, alertó.
