Jeff Bezos, fundador y director ejecutivo de Amazon, lidera por tercer año consecutivo la lista de los estadounidenses más ricos que elabora la revista Forbes, dominada en sus puestos más altos por fortunas vinculadas al mundo de la tecnología.
Con un patrimonio estimado en unos 179.000 millones de dólares, Bezos está considerada la persona más rica del mundo y ha visto aumentar su riqueza de manera importante durante la pandemia del coronavirus.
El pasado agosto, Forbes calculaba que su fortuna superaba los 200.000 millones de dólares gracias a la revalorización de las acciones de Amazon, aunque para este listado la revista usa cifras bursátiles de finales de julio, cuando la riqueza del empresario había aumentado un 57 % con respecto al año pasado.
Tras Bezos, aparecen en el ránking el fundador de Microsoft Bill Gates (111.000 millones de dólares) y el jefe de Facebook, Mark Zuckerberg, (85.000 millones).
El veterano inversor Warren Buffett es el cuarto estadounidense más rico y supone la excepción en una parte alta de la lista dominada por empresarios del sector tecnológico como el fundador de Oracle Larry Ellison; el exconsejero delegado de Microsoft Steve Ballmer; el jefe de Tesla, Elon Musk; y los fundadores de Google Larry Page y Sergey Brin.
Los diez primeros puestos los completa Alice Walton, una de las herederas del emporio minorista Walmart, a la que siguen inmediatamente después sus hermanos Jim y Rob.
En conjunto, las 400 personas más ricas de Estados Unidos cuentan con un patrimonio de unos 3,2 billones de dólares, 240 millones más que hace un año, gracias en buena parte a la subida de la bolsa durante los últimos meses. El que menos, tiene una riqueza de 2.100 millones de dólares, lo que sitúa el corte exactamente en el mismo lugar que en 2019.
Este año hay 18 novedades en el listado, entre las que destacan el consejero delegado de Zoom, Eric Yuan, o el fundador del fabricante de camiones eléctricos y de hidrógeno, Trevor Milton.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, continúa en la lista de los estadounidenses más ricos, aunque este año cayó del puesto 275 al 352, después de que su fortuna bajase de 3.100 millones a 2.500 millones por el impacto de la pandemia en sus negocios inmobiliarios y hoteleros.