Ansu Fati mientras m,aneja el balón / EFE | Foto: Friedemann Vogel
A sus 16 años y 321 días Ansu Fati se convirtió este martes ante el Borussia Dortmund en el jugador más joven de la historia del Barcelona en debutar en la Liga de Campeones.
A mediados de agosto todo apuntaba que el delantero nacido en Guinea Bissau jugaría a caballo del filial y del juvenil A, que precisamente hoy, poco antes del partido del primer equipo, debutó en la Liga de Campeones juvenil con derrota ante el conjunto teutón (2-1).
Ansu compartió avión con sus compañeros del juvenil, pero llevó el traje del primer equipo y vio el partido del juvenil desde el hotel de concentración del primer equipo.
No se olvidó, sin embargo, del partido de su todavía equipo con una publicación en la red social Instagram animando a sus compañeros.
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Ansu no solo entró en la lista de convocados -Valverde descartó a Aleñá, Iñaki Peña, Wague y Junior Firpo- sino que acompañó a Luis Suárez y Antoine Griezmann en la delantera titular. En el banquillo esperaba el argentino Lionel Messi, ya recuperado de su lesión muscular en el sóleo.
A Valverde no le tembló el pulso. Se dejó guiar por las buenas sensaciones que dejó el juvenil en sus tres apariciones en la competición doméstica.
Ante las bajas de Messi, Suárez y Dembélé, el técnico azulgrana apostó por el descaro del jugador africano que debutó con buenas sensaciones en quince minutos ante el Betis, anotó un tanto en 45 minutos contra el Osasuna y puso en pie al Camp Nou ante el Valencia con un gol y una asistencia.
Después de que en el Sadar se convirtiera en el jugador más joven en anotar un tanto con el Barcelona en la Liga, este martes en Dortmund rompió los récords de precocidad en Europa en la historia de la entidad.
Ansu superó a Bojan Krkic y a Lionel Messi. El jugador ilerdense debutó con 17 años y 22 días ante el Olympique de Lyon en el año 2017, mientras que el argentino lo hizo con 17 años y 166 días ante el Shakhtar Donetsk.
De anotar esta noche una diana, Ansu se convertiría en el goleador más joven en la historia de la máxima competición, superando el ghanés Peter Ofori-Quaye, que en el 1997 firmó un tanto con el Olympiacos a la edad de 17 años y 195 días.
