La consistencia del mariscal de campo Josh Allen y la defensa rocosa permitieron a los Bills de Buffalo vencer a domicilio por 15-26 a los Cowboys de Dallas en la decimotercera semana de la NFL.
John Brown se convirtió en el primer receptor abierto en la historia de los Bills, que tras recoger un "fumble" de Allen en la cuarta oportunidad.
El mariscal de campo, que se encuentra en su segundo año, encontró el balón debajo de una pila de jugadores, luego de haberlo soltado en una cuarta oportunidad y con una yarda por avanzar.
Allen rápidamente tomó el balón sobre la marca del primero y diez, y luego cayó unas 3 yardas adelante hasta la 28 de Dallas.
En la siguiente jugada, Brown recogió el balón y completó un pase al corredor novato Devin Singletary que anotó el segudo "touchdown" de los Bills para el parcial de 7-13 que sería decisivo.
Aunque los Bills fallaron el punto extra, la ventaja que tomaron ya no la perdieron el resto del camino.
Allen corrió para una anotación e hizo otro pase de "touchdown" al receptor abierto Cole Beasley, quien con seis capturas y 110 yardas avanzadas contra su exequipo fue otro de los destacados en la ofensiva de los Bills.
El equipo de Buffalo se puso con marca de 9-3 en lo que fue la primera victoria que consiguieron en un partido de Thanksgiving desde 1975 después de no haber jugado en el señalado día festivo desde hacia 25 años.
La victoria también permite a los Bills estar más cerca de llegar a los playoffs en la lucha por el Comodín de la Conferencia Americana (AFC).
Allen completó 19 de 24 pases para 231 yardas, sin interceptaciones, fue derribado cuatro veces y colocó en 120,7 el índice de pasador.
Mientras que los Cowboys (6-6) volvieron ir de más a menos y después de inaugurar el marcador tras conseguir anotación en su primer avance para el 7-0, luego se vinieron abajo ante la defensa de los Bills y perdieron el segundo partido consecutivo, el tercero en los últimos cuatro disputados.
El equipo de Dallas, que le dan oportunidad a los Eagles de Filadelfia a meterse en la lucha por el liderato de la División Este de la Conferencia Nacional (NFC), perdieron el cuarto partido por doble dígitos en los seis últimos que disputados durante la festividad del "Día de Acción de Gracias".
El mariscal de campo de los Cowboys, Dak Prescott, completó 32 de 49 pases para 355 yardas, incluidos dos envíos de anotación, le interceptaron un balón, fue derribado cuatro veces y acabó con un 91,8 de índice de pasador.
De nuevo la poca solidez en el juego defensivo y la inconsistencia en el ataque dejaron a los Cowboys con la sexta derrota en los últimos nueve partidos disputados.
La misma también se da cuatro días después que el dueño de los Cowboys, Jerry Jones, acusase directamente al entrenador en jefe del equipo, Jason Garrett, y a sus colaboradores de ser los responsables de las derrotas.
La crítica la hizo el pasado lunes depués que el domingo perdieron de visitantes por 13-9 ante los Patriots de Nueva Inglaterra.
Esta tarde, nada más concluir el partido en el AT&T Stadium de Arlington (Texas), Jones de inmediato abandonó el palco donde se encontraba junto a sus familiares y directivos para bajar al vestuario de los Cowboys.
Aunque todo parece indicar que el enfrentamiento con Garrett significa que el entrenador en jefe tiene ya los días contados con los Cowboys, fuentes cercanas al equipo confirmaron que en lo que resta de temporada no habrá cambio de técnicos en la plantilla.
A pesar que las expectativas deportivas del equipo para esta temporada era la asegurarse el pase a los playoffs y después estar listos en la lucha por el título del Supr Bowl, nada de eso, de momento, han podido conseguir, nin tampoco ahora dan la mejor imagen ganadora en el campo.