Julio Santana | Foto: Julio Santana
El Consejo Dominicano para la Calidad (CODOCA), siendo el máximo representante y consejo rector del Sistema Dominicano para la Calidad (SIDOCAL), tiene la responsabilidad de definir y articular las políticas de calidad y productividad de interés nacional en las áreas de metrología, normalización, ensayo, acreditación y certificación, de acuerdo con las necesidades del desarrollo nacional y los lineamientos y prácticas internacionales reconocidos (Ley núm. 166-12). Desde este importante consejo, presidido por el MICM, se presentó la segunda versión en ocho años de la Política Nacional de Calidad (PNC) 2024-2028.
Uno de los ejes de esta política contempla la actualización del marco normativo y operativo "de acuerdo con las tendencias y pautas prevalecientes en el ámbito internacional". Es crucial ser cautelosos con esta dimensión, ya que el sistema, tal como está expuesto en la ley, parece cumplir con las exigencias de los organismos internacionales competentes. Sin embargo, esto no excluye la posibilidad de mejorar algunos aspectos puntuales de la ley, sin comprometer la autonomía jurídica y técnica de los dos organismos contemplados, ni el carácter no punitivo de los servicios que ofrecen, como son normalización, certificaciones de conformidad y diseminación de la exactitud de los patrones de mayor calidad metrológica nacionales a las industrias y patrones de trabajo.
Es fundamental que prevalezcan y se afiancen dos dimensiones del trabajo en materia de calidad desde una perspectiva sistémica: la dimensión de la oferta de servicios técnicos a los que los actores del mercado recurren voluntariamente, y el plano punitivo en el que los reguladores del Estado, ProConsumidor en primer lugar según la propia ley, exigen el cumplimiento de reglamentos técnicos, ciertas normas de interés público y cualquier otra regulación pertinente. Estos vigilan el mercado, verifican la existencia en los establecimientos y empresas de las certificaciones de calidad o conformidad emitidas por el INDOCAL o por cualquier otra entidad certificadora acreditada, y protegen en todo momento los objetivos legítimos del Estado.
En cuanto a la implementación de un sistema de gestión integrado (implantación de varias normas internacionales de gestión de manera integrada) para hacer más eficiente y transparente la funcionalidad técnica y administrativa de la infraestructura técnica de la calidad, así como para incorporar las TIC a la gestión de sus procesos clave, consideramos que es un objetivo muy acertado y pertinente.
Se propone también la necesidad de un mayor financiamiento del SIDOCAL que, según entendemos, debe ser destinado al logro y reconocimiento de su robustez técnica, y no al incremento de gastos administrativos como ocurre en la actualidad.
Entre los ejes de la PNC figura uno que nos llama la atención. Según el documento, se trata de “fortalecer la capacidad de gestión del Consejo Dominicano para la Calidad (CODOCA) para contribuir con su posicionamiento nacional e internacional”. Entendemos que el CODOCA no debe aspirar a un “posicionamiento internacional” sino a lograr mayores niveles de eficiencia y eficacia en el cumplimiento de las funciones consignadas en la ley como órgano rector adscrito al MICM.
De hecho, la aspiración de lograr un mejor posicionamiento internacional corresponde de hecho a los dos institutos, INDOCAL y ODAC, quienes deben lograrlo por la única vía posible: ofreciendo servicios técnicos que puedan ser aceptados en cualquier parte del mundo, y desarrollar para ello las competencias técnicas necesarias interactuando con la infraestructura mundial de la calidad y accediendo a la asistencia técnica necesaria.
En cuanto al desarrollo de políticas públicas para mejorar la calidad de los bienes y servicios, entendemos que la primera es la PNC, por lo que debería ser el reflejo de un diagnóstico integral de la matriz productiva y de servicios del país en su estado actual. Esto permitiría enfocar los esfuerzos en prioridades reales, cerrar brechas y avanzar hacia el reconocimiento multilateral del sistema.
Aunque nuestro sistema se encuentra en un buen nivel respecto a sus equivalentes en la región, gracias al excelente trabajo desplegado desde el Codoca, tenemos importantes tareas pendientes que no debemos ignorar en esta etapa del desarrollo nacional. En este sentido, la PNC debe ser un instrumento que parta de las realidades actuales en materia de calidad en la industria nacional, los servicios, el comercio, el desarrollo tecnológico, los procesos de innovación y la investigación aplicada, para luego proyectar al futuro las tareas cruciales en materia de normalización, mediciones trazables, certificaciones, acreditaciones y pruebas y ensayos.
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