El alcalde del municipio de Higüey en la provincia La Altagracia, Rafael Barón Duluc (Cholitín), dispuso el pasado 29 de abril que el toque de sirena de la intendencia de los cuerpos de bomberos de ese municipio, solo sea tocada en casos “excepcionales o de emergencia”, ya que constituye a la contaminación sónica.
Según informa hoy un comunicado, a raíz de esa disposición la alcaldía recibió esta semana una comunicación firmada por decenas de instituciones y gremios de la sociedad civil higüeyana, solicitando que sea retomado el toque de la sirena al considerarla una tradición.
Sin embargo, Barón Duluc indicó que la decisión al llegar a la alcaldía no fue improvisada, si no que es el resultado de muchos años de discusiones del sentir de diferentes sectores de Higüey, que en su mayoría, entendían que más que una tradición, el toque de la sirena constituía un malestar para los que residen en dicha zona, pues es bien sabido que la sirena solo se escuchaba en un radio de pocos metros, pero en el lugar donde hay mayor concentración de personas.
- Lee también: Cholitín: aunque no es con mala fe, no es momento correcto para aumento salarial en cabildo de Higüey
El ejecutivo municipal sostuvo que: “como higüeyano, conozco perfectamente el significado que tiene para muchos el toque de la sirena, pero la globalización y los nuevos tiempos, obligan a examinar costumbres que en algún momento tuvieron una razón de ser, pero que hoy día ya no la tienen, pues esos fueron usos del pasado cuando no existían relojes despertadores y con esto servían para avisar a los aldeanos las horas de inicio de jornadas laborales”.
“Si bien somos un alcalde democrático y que nos caracterizamos por tomar acciones de manera consensuada y a favor de las mayorías, somos, sobre todo, respetuosos de las leyes y de la Constitución Dominicana”, agregó.
- Lee también: Rafael Barón “Cholitín” afirma Higüey es uno de los municipios más atrasados
Fundamentó que su decisión está contemplada en los artículos 114 y 115 de la Ley 64-00, sobre Medio Ambiente y Recursos Naturales, el cual se refiere de manera clara y radical, a la competencia de los ayuntamientos en procura de evitar la contaminación sónica, que es la que se produce con ruidos innecesarios más allá de los decibeles permitidos.
Rafael Baron Duluc significó también lo que contempla la Carta Magna sobre el tema, indicando que “el artículo 67 de la constitución dominicana, establece la protección del medio ambiente, estableciendo que es deber del Estado el de prevenir la contaminación”.
“Si bien es cierto que el toque de sirena se ha entendido como parte del folklore higueyano, no menos cierto es que no todo el folklore de un pueblo se considera prudente y productivo, por lo que en muchas ocasiones el mismo amerita modificaciones y adecuaciones. Ejemplo de esto son las peleas de gallos o las corrida de toros, que por toda la vida fueron parte de la cultura de algunos países y hoy están terminantemente prohibidas”, aseguró.