Adriano Espaillat | Foto: Graciela Cuevas
El congresista de origen dominicano Adriano Espaillat acusó al presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, de ser un "pichón de dictador", de perpetrar un crimen contra el país y de querer dar un "especie" de golpe de Estado al rehusarse aceptar los resultados de las pasadas elecciones que dieron como ganador a Joe Biden, lo que degeneró en en el asalto violento al Congreso de parte de sus partidarios.
"Ha sucedido lo que esperábamos de este presidente que ha perpetrado un crimen contra la nación, debe ser enjuiciado por desatar el vandalismo. Un grupo de criminales que están vandalizando el centro de la democracia mundial porque se rehúsan a aceptar los resultados de las elecciones", aseguró el congresista en entrevista con CNN.
Recordó que el sistema democrático de Estados Unidos está basado en sus instituciones sólidas y que sencillamente lo que se está viendo es el comportamiento de un ‘pichón‘ de dictador que es el presidente Donald Trump, que se rehúsa a aceptar los resultados no solo de su reelección, sino también de las recientes elecciones de anoche en el Estado de Georgia.
Dijo que esta mañana cuando llegó, notó que había poca seguridad en el compplejo del Capitolio para enfrentar hechos de esta naturaleza.
“Nos han dado instrucciones de lo que debemos hacer. Yo lo que digo es que en ninguna parte del mundo aceptarían este tipo de comportamiento ilegal, violento e intolerante de sectores racistas, derechistas, que quieren perpetrar su odio a la sociedad completa de Estados Unidos. Pero estamos aquí en defensa de ustedes y de la democracia”, expresó.
Pedió que se haga una investigación formal en torno a las acciones del presidente Donald Trump para que se determine si se trata de un intento fallido de derrocar la democracia.
Se recuerda que tras haber sido arengados por Trump, que insistió en sus acusaciones infundadas de un fraude electoral, centenares de manifestantes rebasaron las barreras colocadas por la Policía alrededor del edificio y asaltaron el Capitolio rompiendo ventanas y puertas y obligando a senadores y congresistas a buscar refugio.
Ante la gravedad de los incidentes, las autoridades locales han decretado el toque de queda en Washington D.C. a partir de las 6.00 p.m. (23.00 GMT).
