Nicolás Maduro, presidente de Venezuela | Foto: EFE
El Gobierno de Nicolás Maduro presentó este miércoles una «enérgica protesta» a Japón a través de su embajada en Caracas, por las declaraciones que ofreciera ayer su ministro de Exteriores, Taro Kono, en Perú en las que habló de la «restauración de la democracia en Venezuela», un país que a su juicio debe «rendir cuentas».
El canciller venezolano, Jorge Arreaza, dijo en una alocución a través del canal estatal VTV que se reunió con el embajador japonés Kenji Okada y le presentó «la enérgica protesta del gobierno bolivariano ante unas declaraciones que diera su ministro de Relaciones Exteriores, el señor Taro Kono, el día de ayer en Lima».
Arreaza señaló que las declaraciones de Taro Kono fueron «prepotentes, injerencistas, violatorias del derecho internacional público, inamistosas, hostiles, hacia Venezuela».
«Ojalá que haya la rectificación correspondiente, si no el presidente Nicolás Maduro, como jefe de la política exterior de Venezuela, tomará las medidas diplomáticas que corresponden en ese caso», advirtió.
Indicó asimismo que al Gobierno de Maduro le preocupa «ver a Japón siguiendo el guión de los Estados Unidos (…) siguiendo ese plan de agresión contra Venezuela» y por ello le han pedido «rectificación» para «mantener las buenas relaciones» que asegura, siempre han sostenido los dos países.
El ministro de Exteriores de Japón estuvo de visita ayer en Perú para reforzar los lazos con esta nación suramericana, que el próximo año celebrará 120 años de inmigración japonesa, y también abordó la crítica situación política y humanitaria de Venezuela y de Nicaragua.
«Compartimos la visión de que Venezuela debe rendir cuentas a la comunidad internacional sobre todos los problemas, incluidos los económicos y sociales, lo que seguiremos requiriéndole», afirmó el ministro japonés.
Señaló además que los temas más urgentes son la restauración de la democracia «con una mayor participación ciudadana» y expresó su respeto a Perú «por tomar la iniciativa de dirigir el Grupo de Lima», que reúne a países en la región latinoamericana que exigen una solución a la crisis política, económica y humanitaria en Venezuela.
