Rosario Murillo, vicepresidenta y esposa del presidente de Nicaragua | Foto: EFE/Jorge Torres
Nicaragua expresó ayer lunes su solidaridad a Estados Unidos, donde 23 personas murieron y decenas resultaron heridas por los tornados que azotaron el estado sureño de Alabama.
«Queremos trasladar nuestra solidaridad, nuestras condolencias a las familias de Alabama, Estados Unidos, donde han muerto 23 personas como consecuencia de un tornado muy grande que devastó esa comunidad», declaró la vicepresidenta nicaragüense, Rosario Murillo, a través de medios oficiales.
El sheriff Jay Jones, del condado de Lee, informó este lunes que al menos 23 personas murieron el domingo, entre ellas varios menores de edad, y decenas resultaron heridas por los tornados que azotaron el estado de Alabama.
Murillo, esposa del presidente del país, Daniel Ortega, dijo que se trató de «una devastación severa, que destruyó casas rodantes, árboles».
«Así que nuestra solidaridad y hermandad, nuestras condolencias también a las familias que perdieron seres queridos en esa comunidad de Alabama, donde se reporta ese devastador tornado», continuó.
Jones advirtió de que la cifra de muertes podría elevarse en la medida que los equipos de rescate inspeccionan este lunes la zona en busca de supervivientes y damnificados.
La mayoría de las víctimas se produjeron en las zonas rurales cerca de la ciudad de Opelika, que cuenta con 26.000 habitantes y está próxima al estado de Georgia.
En su página web, el Centro Médico del Este de Alabama reveló que había recibido a al menos sesenta heridos por los tornados.
De acuerdo con el Servicio Nacional Meteorológico, una decena de tornados tocaron tierra en la tarde del domingo en los estados de Alabama y Georgia con vientos de entre 215 y 265 kilómetros por hora.
La jornada del domingo ha sido la más mortífera por los tornados en Estados Unidos desde el 20 de mayo de 2013, cuando 24 personas perdieron la vida por el «Moore», que devastó el estado de Oklahoma, según el Servicio Nacional Meteorológico.
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció que había hablado «directamente con la Agencia Federal de Gestión de Emergencias para que les dé un tratamiento sobresaliente al Gran Estado de Alabama y la maravillosa gente de que ha sido devastada por los tornados».
