El Gobierno dominicano respondió este jueves al comunicado de la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA) donde llama al diálogo entre RD y Haití, alegando que su condición para conversar con el vecino país es que se detenga la construcción del canal del lado haitiano.

En el comunicado se destaca que las autoridades dominicanas mantienen abierta su disposición al diálogo con las autoridades haitianas, pero con la única condición de que decidan la paralización de la construcción del canal de trasvase en el río Dajabón-Masacre.

«Es preciso resolver esta controversia basándose en el principio de buena vecindad y amistad entre ambos países y sus líderes. En este contexto, el diálogo y el entendimiento mutuo son imperativos, evitando cualquier tensión y trabajando para que se supere el desacuerdo», indicó ayer la OEA, en palabras de Luis Almagro.

“Un diálogo efectivo requiere que ambas partes posean, no solo la buena fe, sino también las capacidades institucionales necesarias y el control efectivo de su territorio para aplicar las soluciones concertadas”, explica.

El Gobierno indicó que los ríos y otros cursos de agua; el mar territorial, el suelo y subsuelo marinos; el espacio aéreo y el espectro electromagnético conforman el territorio nacional. En ese sentido, el río Dajabón, que tiene su nacimiento y su desembocadura dentro del territorio nacional, es inalienable.

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“Esta condición implica que su titular, el pueblo dominicano, no puede por ningún concepto privarse o ser privado de su uso”, resaltó el comunicado.

A juicio de las autoridades dominicanas, la construcción unilateral del canal que se lleva a cabo en la parte haitiana significaría la posible extinción del caudal del río aguas abajo hasta su desembocadura.

“En términos prácticos esto permitiría la enajenación de un bien de dominio público imprescindible, que sirve de sostén para las actividades productivas de la zona y de sus recursos naturales”, añade.

El Gobierno que encabeza Luis Abinader fue enfático en apuntalar que corresponde a las autoridades dominicanas la responsabilidad de garantizar el uso sostenible y la protección de los ríos fronterizos, por lo que ve necesario que Haití detenga la construcción del canal en río Dajabón-Masacre.

“El gobierno haitiano debió suministrar en el momento oportuno la información relativa a los estudios cartográficos, topográficos, geológicos, geotécnicos, hidrológicos o de impacto ambiental necesarios para poder evaluar los beneficios y riesgos del proyecto. Las propias autoridades del Ministerio de Agricultura, Recursos Naturales y de Desarrollo Rural de Haití (MARNDR) reconocieron en un documento entregado de manera informal que el proyecto carecía de planos al momento de su ejecución”, agrega.