La Procuraduría Especializada para la Defensa del Medio Ambiente y los Recursos Naturales (Proedemaren) ocupó 46 cajones con bocinas y otros dispositivos de amplificación de sonido en un reciente operativo contra la contaminación sónica que realizó en diversos sectores del Gran Santo Domingo.

A través de un comunicado se indicó que también incautó 28 hookah y dos máquinas tragamonedas, y que citó a cada uno de los propietarios para que se presenten en la sede de esta procuraduría especializada, para los fines legales correspondientes.

De igual forma, detalló que el operativo se realizó en los sectores El Caliche de Cristo Rey, la Puya de Arrollo Hondo, Villas Agrícolas, Ensanche Luperón, todos en el Distrito Nacional, así como el Ensanche Ozama, de Santo Domingo Este.

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Mientras que, las autoridades inspeccionaron, entre otros, los negocios identificados como D’ Tío Sport Bar, Roselía Bar y Lounge, Colmado Ángela, Colmado Guillermo el Baratón, La Santa Lounge, París, Kardaf Car Services Place y Dir Harm Bar and Grill.

La Proedemaren reveló que los propietarios y administradores de muchos de estos negocios han sido reincidentes, por lo que la institución procederá a solicitar órdenes judiciales para clausuras, secuestro de equipos y cierres temporales o definitivos, según amerite cada caso.

El magistrado Francisco Contreras explicó que las consecuencias por reincidencia en la violación a las leyes van desde tres hasta 30 salarios mínimos y prisión desde uno a tres años. Asimismo, que incluye la clausura del negocio de forma definitiva o por período de 30 a 180 días, según el caso.

Resaltó, además, que la misma Ley 90-19, sobre Prevención, Supresión y Limitación de Ruidos Nocivos y Molestos que Producen Contaminación Sonora, en su artículo 8-2 establece que cualquier persona, grupo de personas, entidad pública o privada puede querellarse y denunciar la violación a esa normativa.