Nadie hasta el momento tiene la respuesta. Resulta difícil poder determinar cuándo llegará el fin de la misma, ya que no hemos vivido pandemia parecida en el último medio siglo, quizás algunas tan letales como el COVID-19, pero no con efectos tan adversos como los provocados y los que sigue provocando el coronavirus.
Aprenderemos a vivir con el virus
Hay que tener claro que el COVID-19 es un virus, y como es conocimiento de todo, es casi improbable que desaparezca por completo. En ese sentido, cuando lleguemos a superar el mismo, se espera que surjan otros brotes, como ocurre con la gripe, la varicela, la conjuntivitis, y otros virus que cada año se manifiestan y repercuten directamente nuestra salud.
Cuando surja el nuevo brote, el impacto causado será de menor escala comparado con los efectos actuales, ya que, a través del tiempo y la tecnología, se desarrollarán nuevos mecanismos y medicamentos con miras a dar una mejor respuesta a las situaciones asociadas al covid-19. Para ese momento, nuestro cuerpo estará más acostumbrado, además que posiblemente podamos contar una vacuna. En la actualidad múltiples países tienen concentrados sus esfuerzos en encontrar la misma.
Tres posibles escenarios
Para responder a la pregunta inicial, vamos a dividir la respuesta desde tres posibles escenarios, partiendo de que el coronavirus no se puede eliminar:
- Que los países puedan controlar la propagación simultáneamente, para así evitar que los contagios se maximicen. La dificultad de este escenario, es que, si uno de los países no puede controlar la misma, todo el esfuerzo sería en vano, ya que un viajero positivo podría ser la gota que derrame el vaso, donde quizás la situación ya estaba controlada. La desventaja con este escenario es la facilidad de propagación del virus, además que el gran porcentaje de los casos positivos presenta síntomas posterior a los 14 días, es decir, que los controles implementados contra el coronavirus en las entradas áreas y marítimas no serían tan eficientes.
- Aplicar la estrategia llamada “inmunidad colectiva”. Es la vía mas fácil para solucionar el problema de raíz, pero también podría salirse de las manos y convertirse en el más letal. Para llegar la inmunidad colectividad solo es posible a través de 2 formas: contagiarse y recuperarse (crear anticuerpos) o por medio de la vacunación masiva. Aunque la primera forma mencionada es empleada por algunos países en la actualidad, los índices de contagio y mortalidad del Covid-19 hacen que se descarte de forma tajante por la mayoría de organismos y ministerios de salud del mundo.
- El último escenario es el más lento, aunque el más seguro. Consiste en esperar que los centros de investigación pueden encontrar la vacuna; dicho periodo podría tardarse entre 12 y 18 meses, y, no obstante, habría que sumarle el tiempo que conllevaría hacer la distribución de la vacuna a todos los países afectados en un primer momento.
Si bien es cierto que la cuarentena y el toque de queda no es una solución atractiva para nadie, no es menos cierto, que la misma ha permitido prevenir una ola de contagios y el colapso de los hospitales del país.
Sin embargo, las autoridades de salud de la República Dominicana tienen el reto de seguir aunando esfuerzos para disminuir el factor promedio de infección a la fecha que es de 1.17, para que, dentro de poco, podamos considerar la posibilidad de ir abriendo los comercios gradualmente, como también el sistema educativo a todos los niveles.